Detrás de tus ojos azules

Mi parte del plan es Protegerlos.

-¿Pasa algo Javier?-dijo asustada Yanileisy por el silencio de su amigo-

-Es sólo... que, tus sueños son parecidos a los míos

-¿en verdad?-dijo incrédula-

-¿QUE HABÍA DICHO?¡ERA TAN TORPE!- son parecidos, no exactamente iguales

-¿Sabes?, tengo bastante miedo que algo malo me pueda suceder

-Nada te va a pasar, no permitiría que eso pasará-respondió Javier finalizando con una sonrisa-

-Gracias Jav, ¿Ves que sí eres mi ángel?-dijo Yanileisy con las mejillas rojas, mientras abrazaba a Javier-

Javier sonrio y puso a andar el auto, a el lo tenía bastante nervioso aquello, ¿Cuanta influencia estaba usando contra ella, como para lastimarla físicamente?. El debía cuidarla e informarle a Santiago, ambos deberían encontrar una solución.

El resto del camino fue en silencio, veía a Yanileisy sonriendo mientras el aire golpeaba su rostro y despeinaba su caballera, ella era como una pequeña niña.

Al llegar ala playa ambos bajaron sus cosas y se tumbaron en la arena.

-¿Vas a broncearte?-pregunto con sorpresa Javier-

-No, es protector solar-respondió poniendo protector en sus brazos-

-Protector ¿eh?-dijo- yo no lo uso.

-¡Sabes el daño que haces a tú piel!

-No, pero no interesa

-Hola Isy-dijeron unas chicas mientras se acercaban a ellos-

-Hola Antonela, Esthefania y Elizabeth-sonrio Yanileisy-

-No nos presentaras a tú amigo- sonrio Estefhania, mientras sus grandes ojos azules brillaban-

-¿Disculpa?

-Un gusto soy Estefhania ella es Antonela y ella Elizabeth, y ¿tú eres?

-Javier, Javier Dankworth

¿Dankworth?, ahora que Yanileisy lo notaba, ella jamás había preguntado sus apellidos.

-Lindo nombre Javier Dankworth-dijo coqueta Antonela-

-¿necesitan algo?-pregunto Yanileisy con la peor sonrisa-

-Sólo quería acompañarte, bueno las tres queríamos hacerlo.

-oh genial, mientras ustedes se conocen yo iré a traer algo al auto, permiso.

Yanileisy se puso en pie y camino hasta el auto, veía sobre su hombro a un Javier rodeado por aquellas chicas, debía aceptarlo, estaba celosa.

»Santiago«

-Su orden es 4 Hotcakes de vainilla, 1 zumo grande de naranja, Una porción de Tocino, una de tostadas con jalea de fresa y un Omelette de Tocino y queso, ¿Todo correcto señorita?-pregunto por segunda vez asombrada la camarera-

-y un Vaso de Agua, ya sabe, para guardar la dieta- respondió Luna con una sonrisa-

-Muuuy bien-dijo arrastrando las vocales- y usted joven, ¿Que desea ordenar?.

-el desayuno tradicional estaría bien -sonrió-

-en unos momentos vendrá su comida, con permiso-La camarera de unos 56 años se retiró observando el pedido-

-La has dejado traumada-dijo Santiago mientras veía a Luna-

-Oh, no fue mi intención-dijo sin interés alguno-