Detrás de tus ojos azules

Aqui vamos...

El enorme valle verde ante las ventanilla del auto, altos robles adornaban el campo acompañados de flores de muchos colores. El silenció en el auto era calmo al igual que su mirada, claro que imagino que alguna vez tendria que visitar las tumbas de sus padres pero jamas imagino que seria tan pronto, se sentía culpable por las tantas veces que sus padres la habian echo enojar y habia deciado que estuvieran muertos...

Ahora queria borrar todo eso, queria bajar los sabados por la mañana a la cocina y ver a sus padres en la mesa hablando de cosas que considero bobas. que su madre le dijera "mi niña" mientras avanzaban en el centro comercial, queria que todo volviera, pero era imposible. Javier se detuvo.

-¿Estas lista para bajar? -pregunto-

-Lo estoy, vamos

El frio aire golpeo su cuerpo recordando le lo sola que ahora estaba, sus pies la hicieron avanzar por el mar de sepulturas,  sus ojos leian cada una de ellas. Una tibia chaqueta se deslizó por sus hombros mientras alguien tomaba su mano helada.

-Te mostraré el camino, vamos

-si...

Javier le guio hasta donde se encontraba una lápida con hermosos detalles, se veian tan fina, la tumba estaba rodeada d flores y rosas de colores.

" Alejando Lenz y Reneè de Lenz

Ejemplares padres y amigos, vivirán simpre en nuestro recuerdo.

"Las lágrimas son una respuesta inadecuada a la muerte. Cuando una vida se ha vivido con total honestidad y éxito, la respuesta a la marca de puntuación perfecta de la muerte es una sonrisa.""

-Gracias por en... enterrarles juntos, ellos, lo habrían querido de este modo

-Mi madre concidero seria su deseo, te dejare sola un momento, necesito arreglar unos asuntos en la oficina, ¿estaras bien?

-Lo estaré

Javier dejo un beso en la coronilla de su cabeza antes de alejarse de ella, bien sabia que aquello era una terrible excusa para darle un poco de privacidad y ella lo agradecía.

-Sus dedos delineaban los detalles en la lapida- Es bastante bonita ¿no? -sonrió- aun que papa quiza creas que es un poco afeminada para ti -suspiro- no saben cuanto voy a extrañarles, se que siempre me queje de ustedes no me trataban como una adulta, ahora extrañare todas esas cosas que me hacian sentir como bebe.  Todo esto paso por mi culpa por querer ser una rebelde,  al final el escape salio todo mal, Thiago esta bien, aun que esta en el hospital esta recuperándose bastante rápido,  Javier me dijo que el hospital queria darlo en adopción y yo no se que hacer, no se si podre cuidarlo como tu lo hacias mama, pero Javier... el -suspiro- no me dejen sola, cuiden de mi desde donde sea que esten

Una brisa sacudio sus cabellos y congelo las lagrimas que corrian por sus mejillas... cuanto iba a extrañarlos

Las montañas y valles se elevaban frente a sus ojos, el sol se alzaba con intensidad a lo mas alto del cielo, podía ver los rayos del sol reflejándose en sus piernas pero, no sentia aquel calor, era como si se congelarán antes de llegar a ella.  Sus manos aun se aferraban con fuerza aquella pequeña "T".

Javier le había explicado deberian de recorrer un poco de camino en auto para evitar encontrarse con Samanta en el aeropuerto cercano,  en dos dias estaria pisando tierra inglesa, horas mas tarde estaría llegando a Londres, el hermoso Londres que ahora representaba una balla en contra de Samanta y su odio desenfrenado, un Londres que resguardaba su único y mayor tesoro, Thiago.

-Te encantará la comida de este lugar -dijo devolviendo la carta- necesitas comer

-Lo se, pero creo que las chicas de la otra mesa me creen anorexica