Ojos Azules

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-Yo iré por leña, mientras no se ustedes ya saben aumm, ya vengo -Ciel sonrio mientras se adentraba en el bosque-

-No puedo creer que no allás echo caso a mis palabras

-Creí que a las mujeres les gustaba que no siguieras sus instrucciones -sonrio-

-No me vengas con esto ahora, yo prefiero tener el control

-Pareces más molesta tú que tú amigo

-El sólo está siendo cortes contigo -bufo- Santiago no estoy nada feliz contigo

-Parecía que se divertían anoche

Yanileisy le dio una mirada amenazante mientras caminaba lejos de el.

Era domingo por la mañana y Santiago se había aparecido desde la noche del sábado o eso creyó ver.

-No vas a alcanzarme -dijo entre risas Ciel mientras corría al interior del bosque-

-Espérame -chillo Yanileisy mientras le seguía-

Era de noche y la luna brillaba tan fuerte como el sol, las tenebrosas sombras entre los árboles le hacia alborotar su adrenalina, una cola rubia se agito frente a ella mientras escuchaba la burlona risa de Ciel, su pelaje blanco se sacudio sobre la hierba provocando que aquel rubio lobo estuviera más cerca.

"Te alcance".

Observó sus ojos grises brillar sobre la oscuridad invitandole a correr más allá de lo que creía posible.

Sentir la humedad de la tierra debajo de sus pies le hacia relajar cada músculo de su cuerpo.

Un chillido le hizo entrar en alerta moviéndose aún más rápido y se encontró con Ciel en una posición amenazante al igual que el lobo frente a el, Yanileisy se escurrio al lado de Ciel mientras su alarmada mirada se guiaba a quién parecía resultar una amenaza.

Su gran tamaño era intimidante cubierto por sus negros cabellos y su azul mirada... Santiago.

Un gruñido corto el silencio mientras veía como aquel animal se avalanzaba sobre ellos.

Ciel lo hizo caer al suelo mientras se soltaba a correr junto a Yanileisy.

sentía su corazón bombear sangre bastante rápido, haciendo correr con prisa la sangre por su cuerpo, escuchaba las fuertes patas impactar el suelo.

"Regresa hermosa" segundos después eran sus pies quién tocaban la húmeda tierra, alguien tiro se ella por detrás de unos árboles mientras veía su pecho subir y bajar con rapidez, su cuerpo temblaba como gelatina.

-Tranquila -susurro Ciel- todo está bien, no hay de que preocuparse

-¿Acaso no estas conciente de lo que acaba de pasar? -respondió aún más bajo que un susurro-

-Nada va a pasar y sí llegara a pasar, debes correr hasta el auto y salir de aquí

-¿Y dejarte a tú suerte?, ¡no!

-Está bien -rodó los ojos- no se de donde salió

-¿El que?

-El lobo, llegó de total sorpresa sin hacer ni un poco de ruido, fue tan extraño

-¿Te lastimó? -pregunto preocupada-

-No, no debiste acercarte, pudo haber sido realmente peligroso -la regaño ciel-

-pero no lo fue, regresemos al campamento

Y así, fue como Santiago había aparecido en el campamento aquella mañana, Ciel no parecía incómodo al contrario de Yanileisy quién estaba molesta.

Detrás de tus ojos azulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora