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Segundos después de haber escuchado lo que dijo su hermana salió de la casa de Felix con la cabeza hecha un lio. Se le comenzó a hacer dificil respirar con normalidad y sentía una gran presión en el pecho.

No era solo que Yuri le tuviera miedo, aunque esa fue la gota que derramo el vaso, porque sentía que todo se le vino encima. ¿En que momento todo se le salió de control?, ¿Por que ahora se sentia tan ahogado?, ¿Por que cuando todo iba bien se derrumbó?, ¿Por que sentía tanto miedo?

No supo como es que llegó a su casa ni en que momento entró al baño. Solo sabía que no estaba pensando nada con claridad.

Felix no sabia que hacer, sus manos comenzaron a temblar y quedó en blanco al verlo así, tan indefenso. Estaba junto a la pared hecho bolita. Se sentó a un lado de él y tomó con cuidado sus 2 manos con sangre, provocando que el mayor levantara la cabeza lentamente. Con sus ojos llenos de lagrimas suspiró aliviado porque finalmente lo encontró.

Le dolía demasiado verlo así, porque estaba acostumbrado al Minho con caracter fuerte y a la vez tranquilo. Esta era primera vez que veía su lado debil y vulnerable, y admitía que no lo queria ver más porque su corazon se iba a hacer pedacitos.

¿Así se sentía Minho cada vez que lo veía teniendo una crisis existencial?

-¿Estas bien?-Preguntó el pecoso mordiendo su labio inferior evitando que este temblara. Se habia asustado mucho en poco tiempo.

Aquella pregunta hizo que la poca estabilidad emocional que le quedaba a Minho se fuera a la mierda, y más aún cuando finalmente hizo contacto visual con él. Negó lentamente mientras sentía su vista se nublaba debido a las lagrimas que comenzaron a juntarse, y el menor enseguida lo abrazó fuertemente. No habia mejor detonante para largarte a llorar que un "¿estas bien?".

Comenzó a sentir humedo su hombro y pensó en por qué demonios no habia ido a revisar el baño antes que las habitaciones, no es como si el que hubiera llegado minutos antes cambiara lo que iba a pasar pero hubiera estado hace más tiempo con él.

¿Qué hace Minho para calmarme?, se preguntó mentalmente mientras acariciaba su espalda. Casi siempre le decía cosas lindas, o le contaba chistes, pero no creía que lo segundo hiciera efecto en este momento. Ambos eran diferentes, a él le gusta que Minho le haga cariño pero a Minho no le gusta mucho recibirlo, a él le gusta que el pelinegro le diga cosas lindas pero a el no mucho porque "le da vergüenza", y así un monton de cosas.

Si pudiera hablar le diría muchas cosas e incluso podría cantarle algo para que se sintiera mejor, pero aun no podía y estaba decidido a hacerlo en cuanto pudiera escuchar de nuevo. "Todo sería más facil", pensaba el castaño.

Se separaron un poco y Minho desvió la mirada un poco avergonzado de que Felix lo viera así, pero no tenia energías para mentirle y decirle "hey!, ahora estoy bien". Pero no mentia al decir que sintió un gran alivio cuando lo vió de nuevo. Felix siempre llegaba cuando más lo necesitaba, su presencia le arreglaba sus días, su sonrisa le daba una calma interna que no podria explicar, en resumen Felix era un sol y él estaba dispuesto a quedarse ciego de tanto mirarlo. Cerró sus ojos al sentir su suave tacto en sus mejillas limpiando sus lagrimas.

¿Como es que pasó de estar hundiendose en una oscuridad tremenda a estar en un lugar lleno calma?

-Lo siento por irme así-Dijo mirando atentamente sus pequitas.

-Me asuste mucho al no encontrarte-Sonrió debilmente y asintió sintiendose un poco culpable, pero no estaba en condiciones de avisar.-¿Que le paso a tus manos?-Bajó la mirada a éstas y las examinó tratando de recordar que carajo hizo para que estuvieran con sangre, hasta que miró al frente y vio la pared vacia...donde debia ir un espejo. Felix lo notó y siguió su mirada hasta llegar al espacio vacío y entendió.-Eres imbecil pero te quiero-

I want to hear you [MinLix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora