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-¿Por que esa cara?-Pregunto preocupado el de pecas.-¿Es malo?-

-Algo asi-Felix ladeo su cabeza confundido y termino asintiendo.

-¿Robaste algo?-Lo miro con los ojos entrecerrados en un intento de que sonriera o algo.

Hyujin subió sus manos para responder, pero una voz bastante conocida para el se hizo presente y lo hizo bufar.

-¡Se iban sin mi, traidores!-Exclamo JeongIn llegando a un lado de ambos. Miro confundido al mas alto, quien lo  miraba con el ceño fruncido.-¿Que?-

-Nada-Nego con la cabeza y comenzaron a caminar a la casa del menor, ya que éste insistio en que fueran.

La tarde paso rapida para los 3, JeongIn les conto muchas cosas de Japon, les mostro fotos y algunos mangas que habia comprado. 

Finalmente Hyunjin no habló nada con Felix, ni ese viernes ni el fin de semana.

No estaba listo, porque desde un principio no estaba en sus planes contarle a Felix la estupidez que hizo. Pero desde que cierto pelinegro llegó a su salon comenzó a ponerse ansioso.

El lunes transcurría con normalidad para Hyunjin. Con la llegada del menor de los tres ya se sentía más tranquilo, sus malos chistes le hacian olvidar ese miedo constante que sentía en el salón sentandose tras su gran problema. Ver a Felix tan emocionado mientras leía un nuevo libro era también una tranquilidad durante clases.

"Todo está bien", se repetía Hwang mentalmente durante el día.

Ahora todo el salón iba hacia el gimnasio para la clase de educación física, incluido Felix, quien era el guarda celulares.

Él solo podía estirar con ellos, luego de eso se quedaba sentado en las gradas cuidando los celulares de sus compañeros mientras leía.

Realmente quedó encantado con su nuevo libro. Trataba de 3 amigos que querían escapar de un orfanato y se imaginaba a él con Hyunjin y JeongIn, lo cual lo hacia más emocionante.

-Oye niño-Susurró una chica desde la puerta del gimnasio, la cual estaba a un lado de donde estaba el pecoso.-Oye Oye tú-Lo volvió a llamar y comenzó a molestarse porque ni siquiera la miró.-El del libro-Dijo entredientes y nada.-Dios que idiota mas grosero-Bufó entrando discretamente al gimnasio. Ella era de otra clase, solo quería el telefono de su novio.-Oye tonto-Gruñó.

-Oye tonta-Escuchó una voz fría a su lado haciendola sobresaltar.-¿Que quieres?-Minhó frunció el ceño y ella trago duro.

-N-nada-Suspiró dando media vuelta pero él la tomo del brazo-¿Que quieres?-No podia mirarlo a la cara, le daba miedo.

-Disculpate-

-¿Ah?-Ahora si lo miró.

-Que te disculpes por como lo llamaste-Hizo un ademan con la cabeza hacia Felix y ella frunció el ceño.

-¿Perdon?-Más confundida no podia estar, él fue quien la ignoro desde un principio.

-Perdonada, ahora vete-Le dio un empujon hacia la puerta y siguió su camino hacia el pecoso por su celular. Una vez frente a él estiró su mano para que le diera su móvil, cosa que Felix hizo sin quitar su mirada del libro. Se sentó a una distancia prudente de él y marcó el número de su hermana menor. El fin de semana le compró un celular, de esos tipo almeja.

-Estoy jugando a las escondidas lo que sea dilo ya-Susurró rapidamente haciendo reír al mayor.

-Tengo que quedarme hasta más tarde hoy así que ven a mi escuela después de clases-

I want to hear you [MinLix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora