《 Cap 5: Una pérdida 》

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Hange seguía con sumó cuidado revisando el pasillo, y recopilando información que le fuera útil para el caso. Escribió cada cosa que le pareció anormal, iba cuidadosamente observando por aquí y por allá. Ya la policía le habia dejado claro un par de cosas, y en el lugar según le dijeron no se encontro ningun disparo, así que los asesinatos fueron hechos con arma blanca o fueron cometidos de otra particular forma.

-No cabe duda que así es- Se dijo para si misma en vos alta.

-¿Qué cosa?- Alguien con vos angelical que rezono por el lugar le pregunto.

Esto le hizo estremecerse y rápidamente se dio la vuelta para encontrarse frente a frente con la niña de antes.

-¿Eeeh...tu?- Hange grito algo leve, pero muy sorprendida.

Pero antes que Hange pudiera preguntarle algo más, la pequeña salió corriendo por donde seguramente llego.

-¡Hey! espera...ven aquí...- Se puso de pie y dejo sus cosas para ir tras de la niña que le ganaba el paso, pues esta se adelantó y mucho.

Cuando Hange dobló por una esquina creyendo que alcanzaría a la niña, se dio de bruces con alguien.

-Aaahggg- Chillo del golpe que se dio contra un individuo.

-¡Porfavor disculpeme!- Dijo incorporándose lentamente, para ver con quién fue que se se dio de narices.

-No pasa nada, tranquila.- Dijo este con todo de terciopelo, casi adormecedora.

Hange levantó mirada al joven, el era de cabellos café cobrizos, y ojos color miel muy encantadores en verdad, vestía saco y corbata.

-De verdad perdóname, no tendría que correr por los pasillos, fue tonto de mi.- Zoë se acomodó su chaleco y vio como mechones de cabello le caían sobre los ojos y frente, pues parecía que su moño se había desbaratado.

-Jaja, tranquila señorita...no se preocupe para nada, pero bueno, yo le advierto que no corra aqui, si no quiere ser reprendida.- Dijo el de ojos miel, que se acomodaba su corbata negra.

-Y digame ¿Quien me reprendria por tal cosa?- Zoë hizo un ligero movimiento con sus manos al terminar dicha pregunta y esperando la respuesta del joven.

-El señor Ackerman, el de seguro que lo haria.- Le echo un vistazo a la mujer y dio una sonrisita algo extraña.

-Ohh...el- Hange se río para sus adentros.

Ya lo conocía, y no le parecía que le podría reprender por eso.

¿Talvez?

-Oh disculpe mis fallidos modales señorita, soy Ethan Gareth- Se inclinó ante ella.

-Trabajo para el señor Ackerman como uno de sus ayudantes, le ayudó con los equipajes de los huéspedes y de más.- El chico le sonrio a Hange y esta se la devolvió también.

-Un gusto Ethan, soy Hange Zoë.- Le extendió la mano, el cual quedó como levitando en la luna, pero de pasos de unos segundos reaccionó...estrechó la mano de la mujer con un tanto de inseguridad.

-¿Que pasa?- Hange le pregunto con toque de preocupación, viendo la cara del chico, que le quedaba viendo el estrecho de manos

•⊰ 𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐋𝐨𝐬 𝐏𝐚𝐬𝐢𝐥𝐥𝐨𝐬 ⊱•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora