《 Cap 34: Lagrimas 》

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-Amor ¿Dónde esta mi corbata favorita?- Alzo la voz desde la habitacion mirando a su ropero y no encontrando la corbata.

Al escuchar la voz de su esposo, dejó de darle vueltas al pensamiento que la transcurría.

-Esta sucia cariño.- Le contesto dando pasos a la habitación.

-Que mal- Suspiró y tomo otra y la empezó a colocar sobre el cuello de la camisa.

La rubia entró a la habitación observando a su esposo y su elegancia.

-Te ves apuesto cariño.- Se acerco a él dándole su saco.

-Gracias amor.- Respondió con una noble sonrisa.

-Y tu te vez hermosa, como siempre- Le beso una mejilla.

Nanaba sonrio sintiando como florecia una vez más ese capullo de amor en su corazón, cada que su esposo era gentil y cariñoso con ella, pero, aunque el le hacía sentir maravillas, lo que le estaba pasando en ese momento era cosa para no sentir ni un grano de alegria.

-Ten mucho cuidado en el trabajo, Diis te acompañe.- Dijo abrazando al hombre.

-Lo tendre cariño.- Hizo durar su cercania.

Mike suspiro sobre el cabello rubio, olfateando unos problemas sobre esa mujer de temple derecho.

-Cariño- La aparto de sus brazos, teniendo sus manos sobre sus hombros y mirando directo a sus ojos azulejos.

-Se que han habido cosas por las cuales estes preocupada o estresada, pero no temas, que todo estara bien, ten fé en ello.- Dijo sin titubeos el varón sonriendo haciando elevar sus bigote, lo que hizo gracia a la rubia.

-Oh, cariño mio, además, acuerdate que Levi necesita de tu ayuda para preparar su boda con la detective, deberias de ir hoy, y asi, distraerte un poco.- Nanaba respiro profundo por lo dicho.

Era bueno, pero lo que menos deseaba era estar cerca de ellos, aunque, sinceramente no conocía a Hange, y tampoco conocia las claras intenciones por las cuales su padre queria matarla.

-Eh, esta bien, ire.- Respondio con obvia preocupación.

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Despues de que su esposo se fuera a su trabajó, Nanaba se marcho un tanto nerviosa, por el hecho de ir al hotel, el lugar que apenas sus ojos habían conocido.

Ella y Levi no habian tenido nunca una grata relación amistosa, no era de acercarse a el, ni el a ella, tenia sus profundos motivos, y el pelinegro igual. Mike no presionaria a su esposa a que quisiera a su amigo, pero tampoco dejaria que ella hiciera fracasar la relación de los dos.

Nanaba, mujer de gracia, hermosura y educación, criada en Alemania después de haber sido adoptada por Zackly, pero, aunque habia sido bien atendida, su "padre" era un cerdo en muchas areas, y eso llevo a muchos problemas. El hombre la utilizaba a su antojo y por más que se alejara de el, este la encontraba sin problema alguno, ambos llegaron a vivir a la frontera donde Levi habia heredado el hotel, y ahí empezo otra etapa de su vida, espiar al Ackerman, ella, estaba más que cansada de esa horrenda vida... informar o sufrir consecuencias, a veces deseaba acabar con su vida, pero, eso no traería la felicidad que deseaba tener desde una edad temprana, y, un dia mientras circulaba su hora de vigilar miro por primera vez a Mike, que en esos dias tenía el cabello más largo y menos bigote, y a ella le pareció el hombre más hermoso de la existencia, así, que se digno a investigarlo y darse cuanta que era capitan de la policía. Sintió pena, pues, ella era como una mala persona y para ella, el era un ángel...

Los días pasaban, pero ella pensaba en aquel hombre, ocultando todo eso a su "padre" porque, sino este podría matar a su ángel, calló por el bien de ambos.

•⊰ 𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐋𝐨𝐬 𝐏𝐚𝐬𝐢𝐥𝐥𝐨𝐬 ⊱•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora