Sentimientos encontrados

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Todavía siento la euforia por lo que viví anoche cuando Álvaro me despierta cantando en mi oído.

-Lying close to you
Feeling your heart beating
And I'm wondering what you're dreaming
Wondering if it's me you're seeing...

Sonrío antes de abrir los ojos. Desde hace unos días tararea "I don't want to miss a thing" a menudo y esa canción es el amor en estado puro. Me encanta en su voz, me llena el alma.

-¿De verdad quieres saber con quien soñaba? -me acurruco mimosa contra él-, es usted un cotilla, señor Gango.

Ríe y su barba me cosquillea en el cuello cuando me da un sonoro beso.

-Si me dices que no era yo el que andaba por tu mente no te dejaré salir de esta cama en tres semanas -susurra-, hasta que sea lo único en lo que puedas pensar...

Le doy un dulce beso y le acaricio la cara. Me encanta lo guapo que está al despertar, con el pelo revuelto y esa cara sueño, le abrazaría eternamente. Escucho a Blas cantar al otro lado de la puerta y me recorre un escalofrío cuando las imágenes de lo que ocurrió anoche pasan delante de mis ojos. Todavía no he tenido tiempo de procesarlo, pero me siento increíblemente bien.

Llega un mensaje y miro mi móvil. Es de Dean.

"Playa. Limpieza. Échame una mano, por favor"

Se lo enseño a Álvaro. Pone morritos y niega con la cabeza.

-No vayas, quédate conmigo -susurra apretándome contra su pecho-, sigue sin caerme del todo bien...

-Álvaro, no seas injusto -protesto sin demasiada gana-, se ha portado genial con nosotros.

-Alguien que te haya tocado -me acaricia el brazo con la yema de los dedos-, nunca me caerá del todo bien.

Siento una punzada en el pecho. Me importa bastante poco como se lleven Dean y él, pero espero que no lo diga por Blas.

-Alv...no ha cambiado nada, ¿verdad?

Agarra mi barbilla y me mira a los ojos. Le amo tanto, sería capaz de hacer cualquier cosa por él. De hecho creo que ya he hecho más de lo que nunca hubiera querido.

-Dímelo tu -dice desafiante-.

Vuelvo a sentir el miedo. No quiero ponerme a pensar tan temprano en esto.

-Por mi parte no -le beso-.

-Por la mía tampoco -susurra-.

Los dos sonamos a mentira. Claro que algo ha cambiado, sin pensarlo mucho hemos metido en nuestra pareja a Blas....como si entre nosotros no hubiera ya suficiente gente. Ahora sólo hay que saber hasta que punto nos ha afectado.

Me visto con ropa de deporte y me hago una coleta tras lavarme la cara para poder salir corriendo a la playa a ayudar a Dean, al menos eso me librará de tener que hablar más de lo necesario con Álvaro.

Alba y Dean me reciben con una gran sonrisa y un enorme montón de basura. Durante más de una hora recogemos los restos de la fiesta entre bromas, pero mi cabeza está en otro lado. No quiero mentirme a mí misma, si pienso en Blas, no lo hago igual que antes. Creo que mi amor por él se ha elevado al infinito y aunque pensar en los tres juntos me calienta, no soy capaz de imaginarme follando sólo con él. Al terminar vuelvo a mi habitación donde Álvaro está recogiendo nuestras cosas. Me abraza y me besa con posesión, desde anoche es así, cada vez que me toca me hace sentir que le pertenezco.

-Babe, ¿has visto a Blas?, no está en su habitación y deberíamos irnos ya, tengo que estar en Madrid a media tarde.

-No le he visto, ¿le has llamado?

No te enamoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora