Beloved Hearts | L.H

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Narrador omnisciente

—Vamos Bella, es mi primera vez en Los Ángeles y he venido en abril, el mes del Coachella y lo único que quiero es que vayas conmigo —insistió su primo por milésima vez en el día.

Habían pasado tres días desde que Bella había cumplido 25, su primo Javier había decidió quedarse unos días más para pasar tiempo con la rubia ya que ese fin de semana ella tendría que regresar a Nueva York y seguir con sus tareas laborales.

—¿Coachella?

—No seas así Isadora, acompáñame.

—Pero está haciendo demasiado calor, ¿de verdad quieres ir? —dejó de caminar y ver a su primo quien estaba en su cama viéndola empacar.

—Es lo único que quiero hacer, si quieres puedes invitar a tus amigos, sólo quiero pasar tiempo de calidad contigo y que mejor que en el evento más esperado de primavera —ella soltó un suspiro y el sonrió ampliamente, sabía lo que un suspiro se significa.

—De acuerdo iremos a Coachella, llevare a unos amigos y podemos llevar a Jolie si ella quiere.

—Genial, tú hablas con tus amigos y yo lo haré con Jolie.

Se levantó de la cama y fue hasta su prima para darle un abrazo y después salir de su habitación dejándola sola, Bella camino hasta su maleta donde metió la blusa que tenía en la mano y se sentó en su cama y tomó su celular para llamarle a sus amigas.

Todas le respondieron con un si inmediato, al parecer ellas también tenían muchísimas ganas de ir, esta vez Bella no había visto quien iría al festival pues no pensó que iría.

Vio una vez más el número, dudar de las cosas que haría últimamente es algo qué pasa bastante y aún más si se trataba de él.

Al cuarto tono pensó que no le atendería así que terminaría la llamada, pero antes de hacerlo su voz se escuchó en la otra línea.

—Hola Bella —por su tono de voz era imposible descubrir si estaba enojado o feliz.

—Hola Austin.

—¿Necesitas algo?

—Amm no, sólo llamaba para preguntar algo, ¿te gustaría ir a Coachella? Mis amigas, Javier y yo iremos, quizás quieras ir.

—Coachella es el festival de música, ¿verdad?

—Así es.

—Por supuesto, nunca he ido, pero se ve emocionante.

—Es bastante emocionante —aseguró—. Pasaremos por ti en una hora quizá, yo te mando un menaje para avistarte.

—Me parece bien, te veo en una hora entonces.

—Hasta esa hora.

—Hasta esa hora Bella.

Colgó y dejó el celular en la cama una vez más, el sol estaba más ardiente que otras veces, se levantó y tomó su bata de baño para darse una ducha y comenzar a arreglarse, antes de que ella entrará al baño Javier apareció en el pasillo diciéndole que Jolie había aceptado ir.