Nayara
"Muy bien, controlate. Respira conmigo: uno, dos, tres,... Muy bien, ahora hazlo tú sola, solo no te vayas a poner a toser porque sino la gente pensará que tienes covid y eso es malo, muy malo"
No pasa nada, no pasa nada. Solo debo decir alguna excusa y podré irme a casa. ¿Pero como se le ocurre a Andrew traerme con él? Bueno, cuando lleguemos a casa se va a enterar, hablaremos tranquilamente y accidentalmente mi pierna acabará con su desendencia. Igual él ya estaba advertido, entre el numerito de esta mañana y esto, no se cuál es peor.
- Hola - fue lo único que pude decir.
- Hola - dijo Matthew sin quitarme la mirada.
Hubo un gran silencio, incomodo, muy incomodo, nadie decía nada y Matthew y yo no nos quitábamos la mirada. Pude ver a Andrew un poco perdido sin saber que pasaba, mientras que James miraban a cualquier lado. Después de un rati note como Andrew tomaba valor y rompía el silencio.
- En fin, Nayara él es James vamos juntos a clases - lo señaló - y él es su amigo...
- Sé quien es - lo corte.
- Bueno, ya nos conocemos todos, ¿donde queréis ir? - dijo Andrew como si no pasara nada.
- A mi me da igual, ni siquiera conozco la ciudad - comento James - pero Matthew ya lleva unos días aquí y tiene una amiga que puede darnos alguna recomendación.
¿Amiga? ¿Dijo amiga? Muy bien, no nos pongamos celosa, es de lo más normal que las personas tengan amigos de su sexo opuesto, pero también es normal que antes de empezar una relación se crease un vínculo de amistad, entonces eso quiero decir que su amiga no es solo su amiga, o sea si es su amiga, pero es LA amiga.
- Pequeña, ¿escuchaste? - dijo Andrew y lo mire confundida porque no había escuchado nada - Matthew va llamar a su amiga para que venga con nosotros, al parecer esta estudiando en la misma facultad que tu, solo que estudia trabajo social.
- Oh, si claro - no sabía que decir, era la primera vez que me quedaba sin palabras, solo quería ir al departamento y aclarar mis pensamientos - ¿Vamos a tardar? Es que tengo cosas que hacer. Ya sabes que me gusta llevar las cosas al día y organizarme y eso.
No se porque lo dije, simplemente me salio, pero tenía la pequeña esperanza de que Andrew me deje ir a casa.
- ¿Qué tienes que hacer que? El domingo que llegamos ya empezaste a pegar tus calendarios por toda la casa, así que eso de organizarte no me lo creo. Además, no tienes vida social, me parece de mal gusto que ya me estés engañando, recien llevamos tres meses, solo espero que él sea mejor que yo - dijo Andrew en un tono dramático.
- Ya sabes que no hay nadie mejor que tu - conteste mientras suspiraba - solo que tengo que hacer unas compras y eso, ya sabes para cocinar y comer y esas cosas. Encima estoy cansada, hoy casi ni he dormido porque tus ronquidos no me dejan dormir, sigo sin creerme que tus ronquidos sobrepasen todos las paredes hasta llegar a mi habitación.
Cuando terminé de decir eso recordé que no estabamos solos y me giré para ver a nuestros dos acompañantes, James estaba nervioso, se rascaba la nuca y movía la pierna de un lado para otro, Matthew sólo estaba mirando al suelo, sin hacer ningún movimiento.
- Matty - escuche una voz femenina detrás de mi - ¿Cuanto tiempo sin verte? - cuando terminó de hablar vi que Matthew alzo la mirada.
- Nos vimos ayer, aunque entiendo que me extrañes, mírame, soy increíble - no puede verle por la mascarilla pero sé que está sonriendo.
¿Por qué me pasaba esto a mi? De todas las personas a las que podía encontrar en la universidad tenía que encontrarme al chico del que me había enamorado cuando estaba en cuarentena, y lo peor es que sigo enamorada de él. ¿Las cosas no podían ser más fáciles? Yo sólo quería abrazarle y decirle lo mucho que lo he extrañado, que no se vuelva a ir y que volviera a ser mi amigo, como éramos antes.
ESTÁS LEYENDO
Amor de cuarentena
RomansaCualquiera diría que estar encerrado en su casa sería de lo más aburrido, estar encerrado las 24 horas del día sin salir, sin tener contacto con nadie, sin conocer a gente, pero, ¿si no es así? Y, ¿si gracias a la cuarentena conoces a alguien especi...