Conversar

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C24: UNA MUY NECESARIA CONVERSACIÓN

Miya tomó suficiente aire y sabiendo que no podía aplazarlo más, comenzó a hablar. Les contó cómo había comenzado todo, con Reki cuando lo dejo de lado por salir con Langa; y a pesar de que no los culpaba por querer pasar tiempo en pareja le dolió que le mintieran para no querer pasar tiempo con él. Después estaba el hecho de que se sintió nuevamente solo y confundido cuando Shadow comenzó a pasar sus comidas con Oka. El que continuamente se sentía confundido y "dejado atrás" porque no se sentía suficiente para alcanzar a los demás.

Cuando todo dejó de ser divertido y se volvió a dejar caer en la amargura de la soledad y de sentirse traicionado, les contó superficialmente lo que había sentido por su club de Skate, como los que se decían ser sus amigos en ese tiempo también lo dejaron de lado por una estupidez. Y él en su desconfianza, dudo de la amistad que creía tenían. Habló abiertamente de que no quería ser una carga para ellos, porque ¿por qué iba a ser más importante los problemas infantiles de él, que manejar un restaurante o ser un calígrafo tan reconocido?.

Expresó la aversión que le tomó al skate al sentirse tan presionado por todos lados: sus padres, el torneo, Adam, el "S"; y que prácticamente lo había dejado. Sus padres se sentían ausentes pero aun así preocupados. Y lo que había pasado con Langa lo dejo en un muy mal momento, les contó el episodio que había tenido en el muelle, y que en su carrera con Adam, este le había dicho: «No tienes porque sentirte inferior solo porque aquellos que dijeron quererte te dejan de lado; vales mas solo» y que eso lo había molestado, pero que a la vez lo lastimó porque creía era real.

Y comenzó con la parte que más le avergonzaba: Lo que vivió con la pandilla que hace unas horas había ocasionado que lo arrestaran. Como los conoció, se quedó a su lado porque no quería estar solo, comenzó a fumar porque así podría sentir que creció más y estaría más a nivel de todos sus amigos del "S". De su sobreesfuerzo para caer rendido y no tener energía ni para soñar (o realmente tener pesadillas) y para no tener esos episodios del muelle. Y al final no pudo contar mucho desde que fue arrestado porque sentía que su mente había entrado en una turbia nube que no le permitía ver sus recuerdos.

Cherry con toda la paciencia del mundo le explicó que lo que había vivido se llamaba tener un ataque de pánico y que podría estar dentro de un cuadro de un trastorno ansioso y de depresión. Joe como la voz de la razón en ese momento, le dijo que lo más sensato era decírselo a sus padres, para que ellos pusieran cartas en el asunto y lo alejaran de Adam lo más posible; que también tendría que buscar a un nuevo representante, y que debía hacerse a la idea de que los demás (Hiromi, Langa y Reki) harían preguntas. Y Kaoru con todo el cariño que le dejó en claro que le tenía, le ofreció acompañarlo con el psicólogo que lo había atendido tiempo atrás.

Miya después de conversar con los mayores llegó a la conclusión de que lo mejor sería contarle a sus padres, pero temeroso a sus reacciones decidió aplazarlo hasta que descubriera como. Y el terapeuta también deberá esperar a que sus padres se enteraran o que el trabajara porque se negó rotundamente a recibir el dinero de Kaoru y Kojiro.

Después de eso y viendo como el cielo comenzaba a clarear, los 3 fueron a intentar dormir un poco. Más que nada Kaoru, quien tenía una reunión temprano.

UNA FAMILIA PARA MIYADonde viven las historias. Descúbrelo ahora