UNA FAMILIA PARA MIYA

Pasado y petición

C27: EL PASADO Y UNA PETICIÓN ENTRE FLORES

Kojiro había ido a visitar a Hiromi a la florería con la excusa de comprar flores para su madre. Lo cual no era una mentira del todo, porque si vería a su madre el fin de semana; pero no era toda la verdad.

Había ido para pedir su apoyo... O algo así. Después de su momento de rescate no habían vuelto a hablar; pero sabía que le debía una explicación como mínimo de lo que pasó después de que él y Kaoru se llevarán a Miya. La gerente de Hiromi muy amablemente le cedió su oficina para que pudieran hablar, y Kojiro le contó lo que había pasado y lo que Miya les había dicho durante la cena.

Obviamente no con el lujo de detalle con el que se los había dicho el niño, si no un panorama general de los acontecimientos y emociones. Hiromi escuchó atentamente, tomándolo todo con la madurez e interés que un adulto debe poner cuando se tratan de temas delicados como el de Miya. Luego tomó aire y miró a su amigo.

— Y entonces ¿le dirá a sus padres?.

— Tiene que. Dice que Adam no se presentó estos días para no hacer una escena pero su asistente estaba bastante golpeado en algunas partes que la ropa no lo tapaba. Cree que fue porque él delató el plan de Adam. Y sinceramente los únicos que pueden hacer algo para detenerlo en el entrenamiento, son sus padres.

— ¿El mocoso no dice que sus padres no lo quieren?

— Creo que, más bien ninguno de los tres se sabe expresar. — Kojiro suspiró y miró a Hiromi con nostalgia— Me recuerdan a mi padre sinceramente. Crecí la mayor parte de mi vida creyendo que él no me quería y que me culpaba por todo lo malo que le pasó. Y terminé tomando a el padre de Kaoru como si fuera mi padre, porque el señor Sakurayashiki me dio lo que siempre añore de niño. Un padre amoroso que me abrazara cuando lo necesitaba, que me dejara llorar en su hombro y que me diera muestras de afecto físicas; o que me dijera que me quería. Pero mi abuelo nunca fue amoroso con mi padre, incluso lo golpeaba como si su vida dependiera del sufrimiento de su hijo y lo terminó abandonado, a él y a mi abuela; entonces mi padre con el temor de hacerme daño jamás me mimó, porque le recordaba a los golpes del suyo. Cuando me enteré de lo que había pasado era un tanto tarde para solucionar nuestra relación, pero siento que aún no es tarde para ellos.

Hiromi apoyó una mano en el hombro de Kojiro y le dio un apretón en señal de consuelo, a lo que él le sonrió en agradecimiento.

— Lo lamento, hermano. — Hiromi lo miró un tanto desconfiado al analizar a dónde llevaba todo lo que su amigo le había confesado— ¿Pero hay algo a lo que quieras llegar con esto?

— Si , de eso te quería hablar. Kao y yo necesitamos tu ayuda. 

[...]

Creo que a veces olvidamos que Shadow no es solo el dramático y el "payaso" del grupo, si no que es un adulto responsable y una persona comprometida con aquellos a los que aprecia.