Querer

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C57: ÉL LA QUIERE


Koyomi era sorprendentemente similar y diferente a Reki. Debió saberlo, no es que por ser hermanos fueran copias idénticas, pero, aun así siempre era fácil hablar con ella. No sentía que tuviera que medirse, era agradable.

Koyomi se sentía como una especie de respiro; se sentía correcto pasar tiempo con ella. Y ella le agradaba, aunque a veces no la entendía y ambos estaban aprendiendo los límites con el otro.

El límite de Koyomi era hablar sobre noticias trágicas, y nada de películas de animales donde alguno sufriera o muriera. O en ciertos días, nada de muerte o insinuación de ella, de ningún tipo.

Koyomi aprendió que no debía dejar que Miya viajará en el asiento del frente de un auto, ni debía acercarse demasiado a su cuello; ni lugares oscuros ni fríos.

Y ambos preferían (algunos días) no hablar sobre comida. Ninguno se sentía particularmente feliz con el tema, así que solo lo evitaban.

De verdad Miya le estaba tomando cariño a Koyomi y sentía que Koyomi también lo quería. 

UNA FAMILIA PARA MIYADonde viven las historias. Descúbrelo ahora