C68: ¿TE LLEGA UNA NOTIFICACIÓN AL TELÉFONO?
¿En qué momento se consideraba oportuno llorar? ¿Cuándo uno se golpeaba el dedo pulgar contra la puerta? ¿Cuándo veía una película triste? ¿Cuándo reías a carcajadas? ¿Cuándo te sentías inútil?
O, simplemente ¿Cuándo te hacían sentir mal?
Su terapeuta decía que llorar era sano y liberador. Pero Miya seguía siendo orgulloso y se negaba rotundamente a llorar por algo así. Su madre le decía que llorar era bueno y aun así cuando una conversación o un reproche lo sobrepasaba y no podía hablar por él nudo en la garganta: Se sentía humillado. Por qué su madre le decía que no podía llorar por cosas así.
Quizá por eso cada que quería llorar levantaba la cabeza y respiraba hasta ocultarlo y liberarse si era necesario en un lugar privado. Miya odiaba llorar. Odiaba no controlar sus sentimientos. Miya odiaba no poder llorar sin prejuicios.
¿Cuándo podría llorar para que estuviera justificado por la situación?
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UNA FAMILIA PARA MIYA
Short StoryPor fin había conseguido una familia, además de sus ausentes padres, Miya consiguió un lugar seguro para desenvolverse. A sus 14 años por fin se sentía querido y aceptado... Hasta que las cosas comenzaron a cambiar un poco cada vez. A veces llega a...