-adelante-dije abriendo un libro.
-¿puedo hablar contigo, Kaname?-pregunto Yuki asomando la cabeza por la puerta.
-claro, tengo algo de tiempo-dije acomodándome en mi asiento.
Se adentró en mi estudio, jugaba con sus dedos y no me miraba, se notaba a metros que estaba nerviosa, se sentó al frente mío todavía sin levantar la mirada hacia mí.
-¿Qué sucede, Yuki?-pregunte desganadamente.
-etto… etto…-levanto la mirada encontrándose con la mirada de Zero, haciendo que la expresión de Yuki se endureciera-¿podemos hablar a solas?-pregunto entre dientes.
-no, estaba hablando cosas muy importante con Kiryuu-kun, así que habla-dije con voz dura.
-entonces no hablo-dijo haciendo un mohín cruzándose de brazos.
-bien no hables y ándate, tengo muchas cosas que hacer-dije girando mi asiento.
-pero, Kaname-susurro poniendo carita de cachorrito a medio morir.
-Kuran, mejor espero afuera-dijo Zero mirando a mi esposa-si me disculpan-hizo una leve reverencia para desaparecer por la puerta.
-no entiendo, porque siempre lo apoyas o lo defiendes-dijo
-eso no tiene que ver contigo-dije frunciendo el ceño-dime a lo que has venido a hablarme, no tengo mucho tiempo.
-etto… Ichijou-san hablo conmigo sobre lo de tu descendencia-dijo con un leve sonrojo.
-¿y?-dije irritado.
-sé que eso es importante para nuestra sociedad, así que…
-espera un minuto-la interrumpí-eso ya lo hable con Asato-san y encuentro que fue muy descortés de su parte hablarte de eso… Yuki, tome una decisión y voy a esperar un año para pedirte el divorcio, pero si me desesperas voy a cambiar de opinión.
-no puedes hacer eso-dijo levantándose de golpe-si lo haces, no podrás tener descendencia y el consejo se te lanzara encima-dijo en un pobre intento de amenaza.
-Yuki, sabes mejor que nadie que nunca me ha importado lo que diga o lo que no diga el consejo y lo de la descendencia no eres la única opción-dije riéndome.
-no te creo-alzó la voz-Kaname, no puedes hablar en serio lo del divorcio-dijo haciendo puchero.
-nunca he hablado más serio en mi vida-me levante dirigiéndome a la mesa donde había algunos licores.
-¿Por qué?... ¿Por qué?-pregunto desesperada.
-porque me aburrí de esta “relación”-dije sirviéndome una copa de vino-creías que toda la vida me iba a conformar con tu actitud de niñita inocente-di un sorbo mirando fijamente a Yuki.
-si piensas así de mí, entonces ¿para qué te casaste conmigo?-dijo al borde de las lágrimas.
-porque vi en ti un salvavidas de la puta vida que estaba llevando después de la muerte de mis padres.
-¡un salvavidas!-grito indignada-eso siempre he sido en tu vida, Kaname.
-anda bajando la voz, que no eres nadie para gritarme.
-bien-secó sus lágrimas con la manga de su blusa-¿algunas vez me quisiste, Kaname?-
-pensé que te amaba, pero nunca te amé, Yuki.
-así que todos estos años de matrimonio han sido una pérdida de tiempo-susurro para sí misma-Kaname, sigue soñando que te voy a dar el divorcio-dijo golpeando mi escritorio.
-Yuki, si me desafías, tú vas hacer la única perjudicada-dije agarrándole del mentón con mis ojos inyectados de sangre-y eso lo sabes-la solté, haciendo que cayera sentada en la silla-ahora ándate, tengo cosas muy importantes que hacer-dije girando mi asiento hacia el ventanal con un libro en mano.
Yuki no dijo nada más y se retiró de mi estudio azotando la puerta. Solté un sonoro suspiro, sé que fui malo con Yuki, pero no la quiero y deseo estar con Zero, él era mi todo ahora y si tenía que lastimar a Yuki para estar con él, lo iba hacer.
-si piensas muchos, se te va fundir el cerebro-escuche en la puerta de mi estudio.
-solo pienso en nuestro futuro-extendí mi mano para se acercara, camino a paso apresurado-¿escuchaste mi conversación con Yuki?-dije agarrándole de la cintura, apoyando mi cabeza en su abdomen.
-sí… aunque era imposible no escuchar-dijo acariciando mis cabellos-fuiste algo duro con ella.
-lo sé, pero no puedo seguir con esta falsa, sobre todo ahora que el consejo quiere que tenga un heredero y sé que si estoy casado con Yuki, Asato-san la presionara para que quede embarazada… y también quiero estar contigo en cada momento-le susurre al oído.
-eres un egoísta-dijo mirándome a los ojos.
-gracias, por el cumplido.
-no era un cumplido, idiota-me empujo levemente para después darme un exquisito beso.
-sabes que eres lo único que necesito-susurre sentándolo en mi escritorio.
-lo sé… tú también eres lo único que necesito-rodeo mi cuello con sus finos y fuertes brazos.
-eres total y completamente mío-murmure antes de juntar nuestros labios…
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Amantes de Sangre
FanfictionUna vida sin ninguna emoción... Así es como vivía Kaname hasta una noche de insomnio, unos ojos amatistas lo cautivaron