Cap. 30

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A la madrugada llego Akatsuki junto con Aidou, me despedí muy a mi pesar de mi adorado Zero. Me monte a Karu y cabalgue hacia la mansión, aunque preferiría no irme del lado de Zero, pero tenía claro que era por su bien y el de mi hijo. A lo lejos puede divisar la mansión, provocando que soltara un profundo suspiro, ahora tenía que interpretar un papel aunque sea por un tiempo, ya que me separaba de Yuki sí o sí.

-bienvenido Kaname-sama- me recibió Lady haciendo una leve reverencia.

-¿y mi esposa?-pregunte algo desganado.

-todavía se encuentra durmiendo, majestad-contesto

Me encamine hacia las escaleras dirigiéndome a la habitación de Yuki. Al entrar la habitación estaba todos a oscuras, no se filtraba ni un rayo de sol.

-despierta, Yuki-dije corriendo las cortinas, recibiendo un gruñido de respuesta-no me vengas con gruñidos ni nada por el estilo, te levantas en este mismo instante.

Al escucharme se levantó en un segundo lazándome una mirada que a muchas personas les aterraba, pero a mí no me hacía ni cosquillas.

-¿Qué quieres Kaname? es muy temprano-gruño estirándose.

-tenemos que hablar-sentencié.

-si es del divorcio, no hay nada que hablar.

-no me preocupo sobre el divorcio, que eso ya está en marcha.

-yo no he firmado nada.

-no es necesario-dije despreocupado-nuestro matrimonio no fue consumado, por lo cual lo puedo al anular cuando yo quiera.

-no puedes probar aquello-replico.

-si hay un método para probar que una mujer siga siendo virgen y créeme no es nada agradable-me sentí satisfecho al ver la cara de miedo que puso Yuki al escucharme-también todos conocen tu manera infantil de comportarte y estate segura que nadie va poner entre dicho lo que diga, si no mal te recuerdo soy el rey, y nadie en su sano juicio va contradecirme.

-el consejo no te lo va permitir y lo sabes-dijo angustiada.

-sabes perfectamente que lo que diga el consejo me importa tanto como lo que hagas tú.

-necesitas a un heredero.

-no te preocupes eso ya lo tengo.

-no te creo, ¿con quién?-pregunto furiosa.

-sinceramente crees que lo voy a decir, eres demasiado ingenua, querida Yuki.

-¡te exijo que me lo digas!-grito

-tú no me exiges nada-la agarre del cuello-en dos meses más van a salir los papeles del divorcio y con ellos te quiero lejos de esta mansión-le susurre con los ojos teñidos de sangre-¿entendido?-asintió-buena chica.

Salí satisfecho de la habitación de Yuki. Me dirigí a mi habitación para bañarme y cambiarme de ropa.

-Kaname-sama-llamaron a la puerta.

-pasa-dije abrochándome la camisa, aun con el cabello algo húmedo-¿Qué sucede, Lady?

-Asato-san lo espera en su despacho-informo, al escuchar el nombre del abuelo de Takuma fruncí el ceño.

-enseguida voy.

Lady hizo una reverencia y se retiró. No me agradaba nada la idea de que Asato-san estuviera en mi mansión, desde que conoció a Zero siempre ha inventado excusas para aparecerse por aquí lo cual era muy desagradable.

-¿Qué es lo que lo trae por aquí, Asato-san?-pregunte entrando a mi despacho, al verme se levantó enseguida.

-Kaname-sama lo que me trae aquí es algo muy personal-dijo con una sonrisa, haciendo que mi ceño frunciera más de lo que ya estaba.

-dígame.

-vengo a llevarme a Kiryuu Zero-dijo como si nada.

-Zero-kun no se encuentra aquí-informe aguantando todas las ganas de arrancarle la cabeza-la asociación le ordeno que abandonara esta mansión.

-¿en dónde se encuentra?-pregunto con una radiante sonrisa.

-se encuentra con sus maestro Yagari Touga y Cross Kaein-sonreí con satisfacción al ver como su sonrisa se iba desvaneciendo-Asato-san le doy un consejo, deje tranquilo a Zero, porque no acepta como mucho dicha a los vampiros y menos sin son del consejo, le puede preguntar a Higari-san como lo dejo Zero cuando lo cabreo, sinceramente yo no me metería con él.

-voy a tomar en cuenta su consejo-dijo con el ceño fruncido-ah otra cosa, desearía saber, ¿cuándo Yuki-sama va quedar en cinta?

-eso nunca va a suceder-respondí en el tono más despreocupado del mundo.-tengo planeado divorciarme.

-¿Cómo?-pregunto exaltado.-no puede hacer aquello, usted debe tener descendencia.

-para ello, no necesito a Yuki-explique levantándome  de mi asiento.-creo que es hora de que se vaya.-le señale la puerta.

-como diga, Kaname-sama-dijo levantándose.-le informare de nuestra conversación al consejo, a ver que dicen de esto.

-Asato-san, creo que debería pensar antes de hacer algo que se vaya arrepentir,-murmure mirándole a los ojos-porque si lo que busca es un enfrentamiento conmigo, eso va a tener-el color de su rostro se esfumo enseguida.

No pronuncio palabra, simplemente hizo una reverencia y salió por la puerta.

Caí rendido en mi silla, no me agradaba que Asato estuviera tan encaprichado con Zero, debía ponerle un alto aquello, pero no podía mover mis piezas sin antes divorciarme de Yuki, solamente por dos meses iba a tener la manos atadas referente a este asunto, lo cual no me agradaba en lo más mínimo…

Amantes de SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora