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1/parte del maratón.

Sus pasos eran precipitados hacia las escaleras, consciente de que Taehyung la seguía de cerca, manteniendo cierta distancia entre sus cuerpos.

Ari empujó la puerta de su habitación, haciendo que esta chocara contra la pared y sin darle demasiado importancia, se acercó al armario agarrando un abrigo y un par de zapatos prendas fundamentales. Ni siquiera le importaba que se quedará ahí toda esa ropa que Taehyung le compro, tenía pensado marcharse.

Taehyung la miró mientras ella se colocaba las prendas. Permaneció de pie en el marco de la puerta, viendo como ella se limpiaba las lágrimas de los ojos.

Ari lo apartó bruscamente para poder pasar por su lado y encaminarse hacia las escaleras. No estaba pensando claramente, no tenía a donde ir, y en su mente no se imaginaba pasar la noche en la calle. Taehyung sabía que eso la detendría, mantenía la esperanza de que al menos se quedará una noche, permitiéndole así la oportunidad de explicarse y evitar que se marchara.

Cuando ambos alcanzaron la puerta principal, Ari se congeló con la mano en el picaporte mirando la madera oscura de la enorme puerta. Necesitaba un lugar donde quedarse, y Taehyung le conseguiría ese lugar.

Se giró enfrentándolo con decisión. Él ralentizó sus pasos terminando de bajar las escaleras y esperó en silencio a que ella hablara, ansiando que se quedará.

-Necesito dinero para quedarme en un hotel -fueron sus únicas palabras.

Volvía a ver sus ojos cristalizados por las lágrimas, y todo el avance que había echo todos los días, desapareció en minutos. Se acercó a ella con la intensión de consolarla, pero solo consiguió que se apartara.

-¿Me darás el dinero o dejarás que pasé la noche en la calle?

Esta vez, no intentó a acercarse, saco su celular del bolsillo de su pantalón y escribió al hotel Invictus. La respuesta fue inmediata, le autorizaban a usar el pen-house del hotel por el tiempo necesario, aunque se había encargado de aclarar que no sería él quien pasaría la noche en el hotel.

-Puedes quedarte en el hotel Invictus cuanto tiempo gustes -informó guardado su celular en su pantalón

Ari se limitó a asentir volteándose para salir de la mansión, pero esta vez, Taehyung la detuvo.

-Yo te llevo -lo escuchó decir detrás de ella, pero con razón, no pensaba aceptar su oferta.

No quería permanecer más tiempo en un mismo lugar junto a él.

-No gracias.

Con la culpa carcomiendolo, la vio marcharse, sin siquiera voltearse para mirar atrás, y en cuanto vio a los guardias abrir el portón y ella saliendo con decisión, Taehyung supo que había sido definitivo. La había espantado.

En ese momento, su chófer entró en la sala. Taehyung lo observó unos minutos, y volvió a mirar en la dirección en la que Ari se había marchado.

-Ve detrás de ella, asegúrate de que llegue sana y salva al hotel.

-En seguida señor.

En cuanto Taehyung perdió de vista a su chófer, cerró la puerta de la casa y se encaminó hacia su oficina.

Mientras entraba en su oficina, marco el número de Jin. Escuchó el característico tono Jin al otro lado de la línea, insultándolo por interrumpir su investigación. Taehyung esperó a que sus reclamos acabaran, tomando asiento tranquilamente detrás de su escritorio.

-Tenías razón.

-¿Explícate mejor, Kim?

Taehyung jugueteó con sus dedos intentando encontrar la forma perfecta para decir lo que había sucedido, pero como era de esperarse, no había una forma correcta. Lo sucedido había sido horrible y sin duda alguna había arruinado su noche por completo.

-Ari ya lo sabe -murmuró escuchando como Jin maldecía del otro lado.

-¿Cómo? -preguntó sin tapujos.

-Descubrió la puerta.

-¿Y ahora en donde está?

-Camino a un hotel -suspiró-. No tiene a dónde ir, y sé que no se quedará permanente en el hotel...

-¿Y que hay de tí? ¿Estás bien? -era una pregunta para la cual no tenía respuesta, se sentía culpable.

Todo había sido su culpa.

-Estoy bien -respondió finalmente.

......

Ari no sabía cuánto tiempo había pasado desde que llegó al hotel, nada de eso importaba estaba enloqueciendo de la angustia y la decepción. No podía pensar con claridad, ni siquiera podía respirar, en su cabeza se repetían una y otra vez las imágenes de aquella escalofriante habitación, ¿Acaso era legal? No no podía serlo, no debía serlo.

Recordó la inmensa cama en el centro del cuarto, y las esposas que se encontraban sujetas de los cuatros postes de la cama.

Sacudió la cabeza cuando imágenes aterradoras aparecieron en su cabeza, regresándola a la noche de la violación. Y justo cuando se convenció que podía confiar en Taehyung, descubrió algo que la daño por completo. ¿Cómo un hombre así podía existir? En su cabeza era una abominación, y le era imposible diferenciar a Taehyung de aquel hombre que había arruinado su vida.

Se acercó al ventanal y miró afuera. No podía quedarse mucho tiempo, sería similar a permanecer en la casa de Taehyung y ella quería irse lo más lejos posible.

Sí tan solo sus amigos estuvieran aquí.

Se alejó del ventanal y regresó a la cama. Llevaba prácticamente toda la noche en vela, y aunque la necesidad de llorar se esfumó, estaba rota por dentro.

 Llevaba prácticamente toda la noche en vela, y aunque la necesidad de llorar se esfumó, estaba rota por dentro

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¡HOLAAAA! Aquí está el maratón de celebración por 1k de lecturas 🎉🎉, no se preocupen que la segunda parte la publicaré dentro de unos minutos.

Espero que estén bien y disfruten de este maratón tanto como yo disfrute escribiéndolo para ustedes 💜💜💜

Inmarcesible/ KTHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora