La traición (Wattys 2023).

Decidida.

Y fue ahí cuando lo entendí, pensé en definitivamente no necesitar a nadie más, siempre estuvo frente a mis ojos, lo que tanto soñaba, una vida con Liam. Si di este paso tan grande en vida, lo tomaré en serio, jamás traicionaré su confianza, "La traición", acaba aquí y ahora... mientras sus labios permanecen en mi boca y sus fuertes manos en mi nuca, mientras siento el calor de su pecho, cuanto más me innunda su ser, mientras esté su nombre en mis pensamientos, Liam, prometo serte fiel. -dije por dentro de mí mientras un beso volvía a unir nuestas almas como la primera vez.

 En la mañana siguiente, recibí un mesaje de mi jefe, me inquietó con poco ya que parece tener demasiada prisa. Aparentemente quiere terminar con ciertos diseños, va a lanzar las nuevas colecciones después de todo.

Sali con prisa de la casa en eso de las cinco de la mañana, dejé a Liam tendido en el sofá, él no quiso acostarse en mi cama. Preparé café e hice unos wafles, luego de eso; me marché.

Pasaron las horas y yo me encontraba a minutos de mi trabajo, con los nervios de punta debido a las cosas por hacer. Entrando vi una cara conocida, con sus cachetes arrugados intentando buscar el color rojo tras ruborizarse su piel mestiza, es el prestigioso señor Donato quien se encuentra frente a mí. -extiendo mi mano y le regalo una sonrisa-. Él se queda analizándome con una mirada ilusionada.

Lucia... el motivo por el cual estás aquí realmente; vamos... o mejor dicho, voy... -entrelazó sus dedos e hizo una pausa antes de continuar. -vamos a trabajar en tu traje de bodas. -dijo a gran voz, tan fuerte que llamó la atención de todos en el lugar, especialmente la de Archer, quién acababa de entrar por la puerta de en frente.

Mi jefe me mira y arruga la cara. -eso... creí por tanto tiempo que Archer es quien sueña mucho... no conocía sus pesadillas, los sueños suyos lucia... con otro. -miró a Archer-. -lo siento mucho Archer, pero yo diseñaré el vestido, probablemente el traje del novio. -Archer hizo un gesto de desagrado, intentó disimularlo, pero le fue un poco difícil. – Los dejo- - mi jefe se retira de la habitación dejando una laguna entre nosotros.

Yo me moví inmediatamente del sitio en donde me encontraba. Tomé algunos papeles para comenzar a diseñar alguna cosa, algo que pudiera distraer mi mente de todo lo que está pasando.

Me acerco a la mesa de mi jefe y estiro la mano para levantar unos papeles de lo que parecían ser diseños de vestidos. -Archer toma mi mano y guía su vista hacia mis ojos-. Nuestras miradas se cruzan de una manera inigualable, haciendo que mi piel se erice, me quedo mirándolo por completo sin poder pronunciar una palabra.

-Lucía... dime que todo esto es mentira! De verdad podía creer que seas su novia, pero estamos hablando de un casamiento, tú... quién yo juraba, sería el amor de mi vida. -sus ojos se cristalizaron-. Lucía, si lo hubiese imaginado, no lo  pensaría dos veces antes de pedirte que seas mi esposa. No te imaginas cuán destrozada está mi alma, más sabiendo que esperas un hijo, no obstante, ni si quiera quieres hablarme, te noto muy decidida en cuanto a esto... nosotros. -se hizo un nudo en la garganta-. No quiero renunciar a ti Lucía, no quiero perderte, detesto la idea tan si quiera. Mi alma esta rota en mil pedazos, y con ella en manos te ruego, no hagas esto Lucía, sé perfectamente bien que nos amamos, y estoy seguro de que es puro y real, sé que nuestro amor no se compara con el de Liam, es grande lo que siento por ti, y sé que asimismo tú también lo sientes. -tomó mis manos esperando una respuesta.

Yo me libré de su agarre y lo miré con firmeza, es más que evidente que está destrozado, que su alma y la mía están hecha pedazos. -Ya tomé una decisión Archer... y si te lo preguntas, si lo amo. -sabes que no es cierto. -interrumpió-. Yo lo miré con rabia.

-Está decidido, no hay vuelta atrás. -escupí.

-Sí que la hay... Escápate conmigo lucia... salgamos de aquí y cásate tú conmigo. -apretó mis manos con fuerza-. No tenemos que darle explicaciones a nadie-. -acercó su rostro al mío dejándome casi sin respiración, provocando que mi corazón latiera mas rápido de lo esperado. -apartate de mí. -dije entre los dientes, mientras algo me empujaba a darle un beso... abrazarlo.

De pronto su respiración estaba muy cerca de mi cuello, su lengua se arrastraba como cobra sobre mi garganta, subiendo ligeramente por mi mejilla y repitiendo serenamente dichos movimientos. Más no podía, había prometido no volver a caer en esto. Respiré profundamente y aparté a archer de mi con cierta delicadeza, aun así; dejándolo boquiabierta por mi reacción, en serio él estaba esperando que cediera.

-No podemos volver a vernos... por más que lo deseé, no podemos volver a buscarnos o llamarnos... nunca había estado tan segura, quiero que por favor me entiendas, esto debe acabarse ahora... -dije mientras mis ojos se cristalizaban.

Archer se apartó de mí, no sé lo que está pasando, pero por primera vez en mi vida esto parece una despedida para siempre... archer se alejó de mí y con una mirada rota, dijo las palabras que marcarían nuestras vidas. -Espero que seas feliz-. – me dio un beso en la frente y partió.

Pasaron lo días y yo me mantuve diseñando mi vestido de bodas, tratando de olvidar todo lo que pasó en aquél entonces, prometiendome a mí misma olvidar a Archer definitivamente, tratando de distraerme en nuevas cosas, en este nuevo comienzo, en esta nueva vida...

  Miro tras la ventana y suspiro mientras acaricio mi vientre. - A ley de 2 meses para mi boda... esta que cambiará toda mi vida, un bebé en mi vientre que crece cada día y una pena en el alma que me persigue adónde quiera.

Semanas más tarde... anduve con Zack por todos lados, estábamos mirando decoraciones para la boda... incluso hoy debo ir a probarme un vestido... lo siento por el señor Donato, pero Zack se enojaría si no es el quien eligiría mi vestido de bodas. Y hablando de ello; últimamente me he estado sintiendo muy incómoda, esa horrible sensación como si alguien me persiguiera, puedo jurar que escucho sonidos de fotografías tomadas hacia mí... se lo comenté a Zack pero dijo que estoy paranóica por el embarazo, prometió llevarme a comer algo y hacerme relajar un poco, no ha sido nada fácil para mí poder llevar todo esto. He mantenido a Liam un poco lejos de este pequeño mundo, aunque él insiste en las cosas del bebé... hemos tenido unas cuantas discusiones... él quiere que la boda sea en Viena, pero le dije que no es un tema de discutir, su familia tendrá que viajar hasta aquí. Ramira sigue interna en un hospital psiquiátrico y Archer regresó hace unos días de Acapulco.

-Oye, despierta, hemos llegado. -interrumpe Zack sacándome de mis casillas.

fin del capítulo