La traición (Wattys 2023).

Adicta a ti.

Después que dijo estás palabras creando un eco en mis pensamientos, unió sus labios a los míos otra vez, rodeó mi cadera con sus brazos y me apretó mientras me besaba, yo correspondí, de verdad lo extrañaba y aunque no estaba bien lo que hacía, ya no me importaba. -respiré cerca de su oído mientras subía mi mano hasta su nuca-. Archer bajó sus manos hasta mi cadera mientras nos estábamos besando, solo sentí cuando bajó la cremallera de mi pantalón para después adentrar su mano y frotarla por la superficie de mis bragas. Yo estaba excitada. -gemí-. Le di una mirada atrevida mientras me estremecía por completo, él hizo a un lado mis bragas y practicó todo lo que le dio la gana con sus dedos dentro de mí. Bajó su cabeza hasta mi cuello y mientras hacía eso, seguía moviendo sus dedos, los cuales poco después salieron de mi entrepiernas y recorrieron con rapidez mi blusa, dejando pequeñas huellas húmedas, sin darme cuenta sus dedos llegaron hasta mi boca y se paseaban por mis labios mientras Archer permanecía besando mi cuello. Me dedicó una mirada que me causó excitación y encima de todo, metió sus dedos; mayor e índice en mi boca, una y otra vez... -Ahhh... -solté un suspiro cargado de energía. Lo que Archer continuó con un beso.

Me aparté de Archer en un santiamén cuando escuché que tocaban la puerta, él optó por subir la cremallera de mi pantalón y siguiente a eso, alejarse un poco. Yo aún permanecía excitada. -solté un bufido y caminé para abrir la puerta-. No fue muy agradable para mí ver la cara de  Marianne al abrirla. Saqué la cabeza y permanecí detrás de la puerta, sujetándola para hacerle saber que no deseaba que entrara. - Puedo ayudarte? - Pregunté frunciendo el ceño.

- Vengo por los atuendos, ha pasado más de media hora. - dijo mientras alzaba la vista hacia dentro de la habitación. -suspiré-. Quería pronto alguna excusa para perderla de vista. - Aún estoy con un cliente, es un tanto difícil de convencer. - le expliqué.

Marianne puso una cara extraña. - No se diga más, déjame convencerlo. - se ofreció. -alcé  mis ojos hasta que mi iris desapareció casi por completo, dejándolos en blanco-. Tan solo de pensar que quería merito al decir que ella fue quién lo convenció, ni pensarlo. - No gracias, tú encárgate de tu trabajo. - le dije y luego cerré la puerta con mala gana.

Me volteé al escuchar a Archer reír y fruncí el ceño. - Parece que no te llevas muy bien con tu compañera. - expresó mientras se apoyaba de un maniquí.

Desvié la mirada hacia su entrepiernas y luego regresé a su cara. - No es mi mejor amiga. - dije con sarcasmo.

Él me miró y sonrió. - quisiera irme ahora, pero no quiero salir por esa puerta luciendo así. - dijo mientras ponía la mano sobre el bulto que se hacía en su pantalón. -me encogí de hombros y achiné la mirada-. - espero que compres esto. - le advertí.

- Eso es lo de menos Lucía.. - dijo.

- De cuerdo, todo cargado a tu cuenta. - le dije.

Archer caminó hacia mí otra vez, causándome una leve ruborización que desapareció un poco después de que volteara la cara. -él sonrió mientras su mano se posaba en mi mejilla. - Eres el detalle más hermoso, en estos días no he hecho más que pensar en ti... estoy cansado de cambiar mis sábanas a diario -me miró con tono picarón- . - A causa tuya. - dijo y siguiente a eso me besó.

- Creo que debes irte ya, tampoco traje otros pantalones. - dije sonriendo.

- Causo ese efecto en las chicas. - dijo. - Si se siguen mojando de esa manera, permíteme hacer algo por ti. - deslizó su mano hacia mi trasero y me acercó a él-.

Miré hacia el suelo donde inmediatamente me llegó un recuerdo vago... - no lo sé, estoy esperando algo. - dije pensando en el regreso de Liam.

Ocultó sus labios en su boca y levantó ambas cejas mientras se alejaba. - Entonces llámame cuando quieras. - dijo.