Bestia [Taekook]

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—Jimin Hyung, ¡Ayúdame! —exclamó Jungkook recostando con cuidado a Taehyung.

—¿Qué pasa? —habló la voz del doctor llegando justo detrás del pelirrojo. Apenas observó la situación, rápidamente se acercó, abrió su botiquín preparándose y examinó la incisión.

—¿Señor Jung? —mencionó Taehyung extrañado de ver al hombre—. ¿Cómo...

—Cuando llegué me lo encontré afuera del castillo tocando, aparentemente nadie lo escuchaba, ya vi por qué —explicó Jimin mirando a los dos menores quienes se sonrojaron apenados.

—Jimin, te necesito aquí —dijo el señor mirándolo y Jimin asintió corriendo al baño.

Cuando llegó se puso unos guantes idénticos a los del doctor y se colocó a su lado.

Jungkook veía asombrado como el señor mencionaba palabras nuevas a su vocabulario, pero que al parecer Jimin conocía pues le proporcionaba cada artefacto nombrado.

El menor se vio interesado en cada movimiento que hacían, lo contemplaba todo con los ojos bien abiertos, a su vista el hecho de que alguien poseyera la habilidad de curar a otra le parecía algo sumamente extraordinario.

Salió de su ensoñación cuando Taehyung tomó su mano con fuerza, vio el miedo plasmado en su cara y se arrodilló quedando justo a la altura de esta.

—Mírame a mí, solo a mí.

Y Taehyung así lo hizo hasta que todo finalizó...

Como la anestesia que usaron sobre la herida en algún momento se acabaría, el dolor pronto surgiría y para ahorrarse el mal rato, le dieron pastillas a Taehyung que le inducirían el sueño, las cuales ya casi hacían efecto.

—Shh, no te muevas —regañó el pelinegro.

—Tengo que decirte muchas cosas...

—Lo sé, pero por ahora solo vas a descansar —indicó acomodando la almohada donde reposaba la cabeza del príncipe.

—Kookie, no desaparezcas cuando despierte, por favor —dijo apretando su mano temiendo que nada fuera real.

—Ya te lo dije, no pienso irme de tu lado... Descansa, aquí voy a estar. —Taehyung sonrió y poco a poco sus ojos cerró.

Jungkook suspiró viéndolo dormir, acarició su mejilla y sonrió al sentir que ya estaba calientita como se suponía.

La lista en su cabeza de cosas que deseaba preguntarle solo se hacía más grande, sin embargo, su propósito primordial de ver a Taehyung bien ya se había cumplido, ya podía esperar sin dificultad.

Se levantó con intenciones de ir por un poco de agua, pero un mareo lo paró, sacudió su cabeza recomponiéndose y caminó hasta la mesa sirviéndose en un vaso agua fresca, sin embargo, se detuvo cuando su vista se nubló.

Se agarró de la mesa y cerró los ojos respirando lentamente, la sensación de aturdimiento era fuerte, pero según él la controló, sus pies fueron los que no estuvieron de acuerdo pues al primer paso que dio, su cuerpo tambaleó, para su suerte, antes que alcanzara el piso una mano lo sujetó.

—¿Jimin? —pronunció justo antes de desmayarse del cansancio.

El pelirrojo con esfuerzo lo cargó hasta su cuarto, después regresó con Taehyung a quien miró suspirando, le asombraba ver cómo tanto él como Jungkook priorizaban tanto al otro que terminaban descuidándose a ellos mismos.

"Definitivamente los regañaré cuando despierten" Pensó sentándose a lado del adormilado príncipe y la sonrisa sobre sus labios no tardó en formarse.