temp.2 cap. 2

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Me desperté y tras ver el despertador eran las 4:35 de la mañana, muy temprano era, también noto que estoy sobre Héctor el cual aun sigue durmiendo… y tiene un mano metida en mi pans acariciando la base de mi cola y al deslizar mi pierna sobre él siento que tiene un volcán palpitante, me acurruco mejor y tomo mi celular para ver “furrybook”, en eso veo que Amanda subió por fin unas fotos de cuando estaba en la playa junto a su novio Daniel, les doy “me encanta” a casi todas y sigo viendo lo que los demás publican.
Memes, fotos de comida, fotos en restaurantes, fotos con amigos o familia, imágenes de bendiciones con un Santo y unas cuantas palabras… publicaría mis fotos con mis amigos y actual novio pero tengo agregados a mis padres, hermanos y “Familia”, todos en la universidad saben que soy gay debido a que Héctor me ayudo a salir del clóset por completo, a diferencia de Iván que no quería salir por nada del mundo y yo estando a medias queriendo salir pero con él y no funciono, fue bastando bueno que Héctor sea diferente, con Iván era que nunca nos besamos en publico, no nos tomábamos de la mano, era como si solo fuéramos amigos pero con intimidad… amigos con derechos yo era para él ahora que lo pienso, me alegra que Héctor llegara a mi vida. Sonó el despertador y Héctor lo apaga y me braza para estar bien pegado a él… y sentir su miembro duro contra el mío, dejo mi celular y lo abrazo también, pero por algo tengo esa alarma y es para ir a misa de 8… ¿A Héctor le gustara ir?, no quisiera que se aburriera. En eso tocan la puerta de mi cuarto.


Nuriel -*desde afuera del cuarto* Arael, ya te levantaste para ir a misa, Héctor también puede venir si gusta. *se retira*

Héctor -*medio dormido* prefiero quedarme aquí y abrazarte un poco mas.

Arael -… perdón pero es costumbre para mi el ir a misa los sábados y domingos.

Héctor -¿pero tan temprano?.

Arael -así se puede aprovechar mejor el día, además; le agradezco a dios que nos puso juntos. *acaricia su rostro*

Héctor -jeje, te amo. *le besa en la frente*

Arael -si quieres puedes descansar un poco más y luego nos vemos en la plaza.

Héctor -¿ira Nuriel?.

Arael -si no fuera no estaría tocando la puerta para ir.

Héctor -entonces también iré.

Arael -¿por celos?.

Héctor -no… bueno… un poco, todavía no me fio de él.

Arael -es buena persona y fue amigable contigo ayer, además tu eres mi novio y él no tiene malas intenciones hacia mí.

Héctor -si, esta bien. *lo besa en los labios*

Arael -*lo corresponde*

Héctor -*lo empieza a acaricia desde la cintura para abajo*

Arael -te dejaría tocarme todo lo que quieras pero te tienes que aguantar un poco mas.

Héctor -*mueve su cola* mientras pueda juguetear contigo un poco mas no me importa tener que esperar.

Arael -*se sale de la cama y camina al armario encendiendo la luz* bueno será mejor que empecemos a vestirnos.

Héctor -*aun acostado* como quisiera tenerte todo para mi estos dos días.

Arael -quien sabe, quizás la siguiente semana me la pase contigo.

Héctor -le rogare a Dios por que sea así. *se pone de pie y da un largo bostezo al mismo tiempo que se estira*


Terminando de vestirnos nos salimos del departamento y nos subimos al auto deportivo negro de Nuriel, el cual compró una vez que tuvo el dinero suficiente, noto que Héctor le da un poco de envidia o en su totalidad envidia, así que lo tomo de la mano y me recuesto en su hombro haciendo que se calme, lo ultimo que quiero es que a mi novio se llene de actos pecaminosos y no pueda ir al cielo con migo.
Terminando la misa le pido que vaya con el padre para que confiese sus pecados, me hace caso y yo me formo detrás de él, también quisiera confesarme por decir y ver cosas que no debería de haber dicho y visto e incluso pensado durante todo el campamento de verán militar. Ya que Héctor avía terminado, era mi turno y justo cuando iba a terminar digo lo siguiente para ver cual es la reacción del padre.


Arael -y por ultimo, soy gay y el que paso antes que yo es mi cómplice por que es mi novio, eso es todo.

Padre -eso ultimo no cuenta como pecado hijo mío, ya que es algo dictado de tu corazón que te ara feliz si él es la persona con la que piensas pasar el resto de tu vida y si llega a ser el caso con gusto siempre son bienvenidos a celebrar su boda en mi iglesia y darles la bendición de Dios.

-…(〃゚3゚〃)

-si no hay nada mas que decir, repite después de mi; "Padre misericordioso que estas en los cielo, ante ti—"


Terminando la oraciones para el perdón de mis pecados, me uní con Nuriel y Héctor los cuales estaban teniendo un competición de pulsos… a ambos y mas a Héctor se les marcaban los músculos y las venas del brazo derecho, esta más que claro que Nuriel va a ganar pero…


Arael -¡¡Tu Puedes Héctor!!.

Nuriel -*se distrae*

Héctor -*toma coraje y se adelanta*

Nuriel -*retoma el control y aplica un poco más de fuerza y gana* listo jeje, terminamos, sigue haciendo ejercicio y podrás ganarme la próxima, yo me estaré yendo rumbo a mi trabajo, imagino que estarán juntos por el resto del día así que diviértanse. *se retira*


Jamás te podrá ganarte Nuriel y lo sabes, no le des falsas esperanzas a mi novio ( –3–), no puedo dejarlos dos minutos sin que se estén queriendo arrancar los ojos y mas por parte de Héctor y sus celos por demostrar ser mejor hombre para mí.

Perdido En Tu Cielo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora