Temp. 3 cap. 3

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Bueno, aquí estamos, después del matrimonio civil y la despedida de soltero llega el gran día en donde dos almas se adentran a la casa de Dios y llegan asta el altar juntos en donde el padre dice sus oraciones y bendiciones para juntar a las dos almas en sagrado matrimonio, estoy muy feliz por Amanda y Daniel que por fin después de tanto tiempo se pudieron casar, después de la boda en la iglesia nos fuimos a un salón rentado junto a la orilla de una playa para celebrar su sagrado matrimonio, comida tropical, música, las típicas costumbres que se tienen que hacer en este tipo de fiestas;

-los amigos lanzan al novio al aire mientras que poco a poco le quitan una que otra prenda de vestir para que así la novia pueda presumir al macho con el que se casó.

-el baile de los billetes.

-la fila de los casados, en donde los amigos, amigas y familiares tienen que pasar por debajo del Belo de la novia.

-una danza inesperada en donde los amigos del novio y él bailan mientras que la novia esta sentada en una silla viendo el espectáculo.

(tengo que admitir que me existe por tan solo ver a Héctor bailar seductoramente, bueno, eso y por que cuando llegó la ora de bailar de esa forma los amigos fueron con sus respectivas parejas y comenzaron a bailar de esa forma, sip Héctor me empezó a perrear mientras que yo estaba sentado y aguantando las ganas de no tener una erección enfrente de todo público)

Asta que llegamos al punto en que la novia lanzará el ramo de flores y todas las mujeres se hicieran bolita detrás de ellas, pero no solo eso, sí no que también entre todas me agarraron y me llevaron con ellas, ósea… se que soy el pasivo de la relación entre Héctor y yo y que él tiene todas las ventajas de ganar por su buen cuerpo de macho que tiene, pero aún así sigo siendo hombre como para que me agarren de burla en una relación gay, avergonzado solamente me quedo entre ellas esperando a que me suelten y salir corriendo a los brazos de Héctor él cual no hizo nada para liberarme del agarre de todas ellas, lo voy a castigar llegando a la casa *comienza ha hacer pucheros* en eso Amanda esta a punto de lanzar el ramo de flores y yo listo para correr pero… se detiene y camina asta donde estoy yo y me entrega el ramo de flores, pienso que es una broma mientras miro a Amanda pero ella me da la vuelta para ver a un Héctor arrodillado enfrente de mi y con una cajita azul marino de terciopelo con un anillo dentro… sin respiración y sorprendido miro el anillo y después a Héctor.

Héctor -*sudando frío pero determinado* Arael, mi vida, mi amor, mi esperanza, mi mundo entero, me harías el honor de casarte con migo y hacerme de entre los hombres el más feliz de esta tierra?.

Siento una gran emoción dentro de mi y simplemente me lanzo para abrazarlo y besarlo mientras digo “sí aceptó, sí aceptó, mil veces aceptó!!!” todas las mujeres gritan de alegría y los demás invitados comienzan a salvar y aplaudir, completamente enamorado pasamos la noche bailando tranquilamente y al llegar a casa nos entregamos cariñosa y apasionadamente, más que el sexo nos dimos caricias y besos para demostrar el amor que sentíamos en ese momento el uno por el otro, a la mañana siguiente comenzamos a organizar nuestra propia boda y bueno hmhmhm~ el que estaba más emocionado por ello era Héctor y su forma imperativa de pensar las cosas cuando esta extremadamente feliz.
Simplemente no paraca de verlo sonreír por que eso también me hacia sentir mariposas en el estómago, ya solo me había imaginando una vida junto a él pero estaba tan embobado en su sonrisa que lo volvía hacer sin importar cuantas veces desearía que se repitiera dos de aquella noche.


Asta aquí el capítulo de hoy no es mucho pero se entiende que apartir de aquí es buen momento para dejarlo así, espero que les allá gustado, recuerden que me pueden dejar su bellos comentarios y sus lindas estrellitas, nos vemos asta la siguiente.

Perdido En Tu Cielo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora