La hermana de Zayn Malik

#33

-¿Crees que tengamos que decírselo?- preguntó Louis.
-No creo que sea lo mejor.- susurró ella sentándose en la cama.
Louis se sentó a su lado y tomó las manos de ella entre las suyas.
-No importa, me basta con que me hayas aceptado.
-Nunca te rechazaría.- susurró ella.
Él se colocó sobre ella besándola mientras la recostaba suavemente en la cama. Los ojos de ella se cerraron con fuerza cuando los dedos de él acariciaron la piel de su estómago. Sabía que él tarde o temprano iba a notarlo, quizás era tiempo ahora que se había decidido a dejarlo. Después de todo él ya sabía sobre las marcas en sus muñecas.
Él torció el gesto haciendo una mueca y la miró fijamente para luego quitarle la remera y acariciar, con manos temblorosas, las heridas que aún no habían logrado cerrarse del todo.
-¿Te doy asco?- preguntó ella con temblor en su voz y el terror a oír la respuesta, corriendo en sus venas.
Él la miro unos largos instantes y volvió a besarla. Ella lo rodeó con sus brazos mientras pesadas lágrimas caían por los ojos de ambos.
Zayn se acercó a la puerta.
-Vas a tener que contarle a tu hermano.- dijo Louis.
-No, lo conozco, va a sentirse culpable y esto es culpa mía. Yo me hice esto y no quiero que él piense lo contrario.
-¿Vas a esperar a que las cicatrices desaparezcan?- preguntó él suspirando. No escuchó respuesta.- Mi amor...
-Siento que todo lo que hago, lo decepciona.- susurró ella.
-No es así, mi vida.
-¿Diana?- llamó él tocando a la puerta.-¿Estás ahí?
Cuando esta se abrió, apareció su hermanita. La abrazó con fuerza y sonrió.
-¿Cómo está mi princesa?- preguntó él dulcemente, mirándola a los ojos.
-Bien,- suspiró ella abrazándolo con fuerza.- necesitaba uno de estos.
-Sólo necesitabas pedirlo o decirle a tu noviecito que me dejara abrazarte.- ella rió y él le besó la frente.-¿Podes venir conmigo un minuto?
-Claro,- dijo ella.- no me extrañes.- le dijo a Louis antes de depositarle un beso en los labios para seguir a su hermano.
Diana y Zayn entraron en la habitación de él y el chico volvió a abrazarla.
-Necesito saber que estás bien.- dijo él- Es que.. no sabía, ni me imaginaba todo eso. Entiendo que todo pasó en ese maldito tiempo en el que me ausenté, pero Diana, sos lo mas importante en mi vida, lo que amo sobre todo y todos y no puedo soportar pensar en las cosas horribles por las que pasaste. Sé que soy un desastre, sé que cometo muchos errores pero estoy intentando remediarlos porque es lo que vos mereces.- dijo con sus ojos llenos de lágrimas a la vez que se acercaba a ella.- Te amo, sos mi hermana y te amo.
-Zayn,- susurró ella. -no meresco que me trates así.
-¿Por qué?- preguntó él.-¿Por que cortaste tu piel? No te culpo. Yo no hubiera aguantado ni la mitad de lo que aguantaste. Lo sé. ¿Si? Y odio que lo hayas hecho porque yo también soy responsable porque no estuve en ese momento pero, Diana, había tanto dolor en tu interior, me torturaba verlo en tus ojos porque sabía que no iba a ser fácil que pudiéramos llenar tu vida de felicidad. Lo estoy intentando, te juro que estoy intentándolo.
Zayn cayó de rodillas frente a ella, llorando. La chica repitió su acción y lo rodeó con sus brazos. Él la presionó contra su cuerpo mientras intentaba calmarse y así permanecieron unos largos minutos.
-¿Zayn?- llamó ella. -¿Cuántos pajaritos hay sobre la rama del árbol?
-Dos.- suspiró él.
Recordaba cuando ella se lo preguntaba y él respondía, cuatro. Entonces ella preguntaba si iban a separarse y él contestaba a su pregunta negando y sonriéndole.
-No quiero que los pajaritos se separen.- susurró ella y él la presionó con mas fuerza.- Hay más pajaritos en la rama a su lado. ¿Lo sabes?
Él sonrió y asintió dándole un pequeño besito en la punta de la nariz.
-Los pajaritos encontraron una familia mayor.- dijo él.
-La pajarita va a casarse.
Él la miró con sus ojos abiertos como platos y ella elevó sus hombros, intentando ocultarse de alguna manera.
-Pero no va a irse,- susurró ella.- no puede abandonar a los pajaritos.
-Voy a matar al pajarito.- dijo él abrazándola con fuerza.