¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—LOS ÁNGELES, CALIFORNIA. VINNIE HACKER.
Mientras desayuno los magníficos panqueques que Olivia decidió hacer, hago fuerzas sobrehumanas para no verla en todo lo que yo estoy comiendo, pero es malditamente imposible. ¿Por qué diablos no puedo dejar de mirarla?.
Quizás es porque es jodidamente hermosa, o porque luce tan bonita el día de hoy que estoy a un suceso más de ponerme a suspirar como un tonto enamorado. Y eso que apenas hablamos, ya me siento embobado solo por verla unos segundos.
—...pues, mi abuela me decía que no debía comerlos con tanta frecuencia porque así engordaría y no me vería tan linda. —su hermosa voz me saca de mi estado de enamoramiento puro.
frunzo el ceño, lo dice tan tranquila que me da la ligera impresión de que ya está bastante acostumbrada a ese tipo de comentarios. Y no se por que no me gusta imaginarme eso, no me gusta para nada.
—¿que tú no te verías tan linda? Imposible, dudo mucho que eso algún día llegué a pasar, eres preciosa de cualquier forma. —suelto, indignado.
no me doy cuenta de que lo dije en voz alta hasta que levanto mi vista de mi plato con comida y me doy cuenta de que ambos me están mirando. Jett lo hace con una sonrisa burlona y una mirada divertida, en cambio ella...
la boca se me seca al ver cómo me está mirando, tiene una pequeña sonrisita en sus labios y un ligero tono rojizo en las mejillas, haciéndola lucir diez mil veces más linda de lo que es. Sus bellos ojitos tienen un brillo que me hacen dar ganas de perderme en ellos.
para mí mala suerte, Mía y Thomas entran a la sala y paran en seco al vernos en esta rara —pero hermosa, muy hermosa— situación. No puedo despegar mis ojos de los de ella, y para mí suerte, la preciosa de Olivia tampoco tiene intenciones de apartar su mirada de la mía.
sin embargo, el carraspeo de Mía hace que ambos apartemos la mirada al mismo tiempo y que la centremos en ellos.
—eeh, ¿ya están listos para... —Mia comienza a decir. —para... ¿que era, Thomas?.
el pelinegro pone los ojos en blanco y gira a mirar a su novia.
—para enseñarle la ciudad a Olivia. —dice, obvio. —hace más de ocho años que no viene a Los Angeles y creo que le vendría bien recorrer la ciudad de nuevo, y de paso a nosotros también nos servirá para comprar algunas cosas que hacen falta para la casa.
—espera. —le digo. —¿quien más irá?.
—Michael con Natty para comprar el cosito que hace falta para otro cosito, ustedes, Mía y yo. —me dice Thomas, muy sonriente.
—¿puedo ir yo también?. —pregunta Jett.
giro a mirarlo con el ceño fruncido y el ensancha su sonrisa de idiota. No se por que el insulto pero no me gusta para nada como me está mirando, es como si supiera todo lo que tengo en mente y más.
—bien, entonces nosotros iremos en el auto de Michael y tú Vinnie, irás con Olivia y Jett en tu auto. —Thomas me ordena y yo dejo de mirar a Jett para mirarlo a el.
lo pienso un poquito y la bella imagen de ella en mi auto es demasiado bonita como para no hacerla real. Así que termino asintiendo sin hacer el mínimo intento de quejarme, ya que no tengo queja para esto. Estoy más que encantado de tener que ser el que le mostrará la ciudad a Livvy.
—¿y a dónde iremos?. —pregunta la perfección que tengo en frente mío.
Thomas, Mía y Jett me miran casi al instante, yo me remuevo mis dedos con algo de nerviosismo pero lejos de hacerle ver qué estoy cagado del miedo, le muestro una sonrisa de oreja a oreja.
—oh, déjame sorprenderte, querida Olivia.
la veo esbozar una sonrisita y yo no puedo evitar ensanchar la mia. Estoy tan contento que me da un poco de miedo que los demás lo noten, pero si me dejan ser sincero. Está comenzando a importarme muy poco eso, solo quiero hablar con ella, estar cerca suyo y poder conocerla un poco más.
—bueno, me encantaría seguir charlando con ustedes pero debemos irnos ahora ya que está soleado y me gustaria aprovechar que el día está así. —Mia nos habla con una sonrisa. —asi queee, podríamos comenzar a irnos, fuera de la casa, al exterior, fuera, a nuestros autos. Ahora, ya.
suelto una pequeña risita y me pongo de pie, Jett copia mi acción y me hace señas de que saldrá. No hace ni falta que nos digamos nada que con una sola mirada nos logramos entender. Mía nos avisa que ellos se adelantarán con Thomas, Michael y Natty, así que nos quedamos solo Olivia y yo.
camino hacia donde está el gran llavero de la casa y tomo las llaves de mi auto y me volteo para mirar a Olivia, que se encuentra paradita, removiendose los dedos con inquietud, luciendo aún más tierna de lo que ya es.
—¿vamos?. —le hago señas hacia la puerta.
ella pone una mueca como si dudará en decir lo que quiere. Trato de lucir confiable y de hacerle mostrar que puede decirme lo que quiera.
—ehm, si pero... ¿no debería cambiarme?. —pregunta, señalandose así misma. —digo, ustedes son como muy famosos y no quiero, ya sabes, lucir... ¿mal?.
la forma en la que lo dijo, la manera en la que su rostro se movió al formular aquellas palabras me hizo dar cuenta que estoy generando algún tipo de obsesión poco sana. Pero es que, es demasiado, muy, jodidamente demasiado bonita para ser real.
me doy cuenta que me quedé sin decir nada, así que antes de que note que me quedé mirándola completamente embobado, le sonreí y sacudí la cabeza en negación.
—no, así vas perfecta, Livvy. —le aseguro.
estoy en lo cierto, demasiado en lo cierto. ¿Como una simple falda puede quedarle tan bien a alguien? ¿O una sencilla camiseta de tirantes verde oliva?. ¿Cómo? ¿por qué? ¿Esta chica fue esculpida a mano o que?.
aprieto un poco mis labios para no sonreír al verla sonrojarse un poco y al verla abrir su linda boca con asombro. Así que hago algo que no tenía pensado hacer, pero no negare que es lo que quise hacer desde que la vi.
extendí mi mano hacia su dirección e hice una pequeña seña hacia la puerta. Dándole a entender que tenemos que irnos, muy a mi pesar, ya que no quiero irme, quiero quedarme y con ella, preferiblemente.
mi corazón da un vuelco de la emoción cuando veo que toma mi mano sin dudarlo un poco. Ese simple acto hace que quiera ponerme a saltar de la alegría.
sin poder evitarlo me quedo mirando nuestras manos y me regaño internamente por hacer tal cosa. Sin más, tiro de su mano para así finalmente, salir de la casa. Junto a ella.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
vinnie en esta fic? simplemente superior a cualquier ser humano
