𝑳𝒂 𝑽𝒊𝒅𝒂 𝑬𝒔 𝑴𝒂𝒓𝒂𝒗𝒊𝒍𝒍𝒐𝒔𝒂... [Shino Aburame x Oc]

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*Narra la autora*

Después de dos días y medio fuera de la aldea y de conseguir aquella información, volvieron a ésta sin problema alguno.

Se sabe que la misión fue un éxito, lograron obtener los datos que buscaban e incluso un poco más que eso. Sin embargo, ahora que estaban en la aldea, debían prevenir mejor la situación de ésta. Tanto en vigilancia, misiones, tareas dentro de la aldea de la hoja.

Hiro Wakatoshi, Neji Hyuga y Nanami salían con tranquilidad de aquella mansión en la que se encontraba la quinta hokage, Tsunade.
Los tres estaban exhaustos, pues no se dieron ni un minuto para descansar en toda esa misión, no querían tardar mucho, puesto que Nanami tenía cosas que hacer e Hiro había dicho que tenía un tiempo determinado para cumplir con lo necesario en esta tarea. Claro que Neji Hyuga era el más ansioso por llegar a la aldea, pues al momento de llegar, obtendría su respuesta de parte de la chica a la que había invitado a salir.

*Flashback*

Nunca en su vida había sentido tantos nervios, temía a ser rechazado por la chica que le gusta, pero lo intentaría. No quería perder sin intentar por lo menos invitarla a salir.

– ¿E-entonces?
– Prometo que te responderé cuando hayamos vuelto a la aldea.

Respondió aquella chica de cabellos cafés. Por su puesto que eso tranquilizó un poco al chico, pues si lo rechazaba en ese momento, no sabría cómo sentirse el resto de la misión.

*Fin del flashback*

Nanami estaba cansado, por lo que quiso romper con la tradición de ir a comer ramen después de cada misión. Se despidió de los chicos y se tomó el día para descansar.

Por lo tanto, estaban Neji Hyuga y Hiro Wakatoshi juntos, en silencio y sin saber qué hacer, veían cómo el mayor los dejaba solos.
El alto se sentía ansioso por saber la respuesta de la chica y es que Hiro lo había prometido.

– Bueno, creo que yo también haré lo mismo... Extraño a mi familia...
– ¡Hiro-san! – habló el chico con exasperes.
– Oh, ¿Sí?
– Siempre ¿Qué pensaste? – preguntó con curiosidad y con arrogancia, tal vez eso nunca saldría de su ser. – Respecto a lo que te dije hace casi tres días.

Claro, ella lo olvidó por completo. Trató de evitar su respuesta debido a que no sabía qué decirle, si bien, aún sentía algo por Shino Aburame, sin embargo, él había dejado en claro que solo eran AMIGOS.
Probablemente le daría la oportunidad al de los ojos claros.

– No quiero ser insistente... Bueno, olvídalo mejor... – se dio la media vuelta, tal vez no serviría de nada ser buena persona.
– ¡Sí quiero!

Aquel frenó de inmediato al escuchar una respuesta positiva. Quería gritar, saltar de la emoción, llorar. Al parecer los consejos de Guy sensei y Rock Lee había brindado frutos.
Solo hizo una reverencia, estaba seguro que era la mejor opción ya que, quería abrazarla fuertemente y lo último que quería era incomodarla.

– Entonces...
– ¡Vamos a comer juntos a Ichiraku ramen! – propuso la chica al ver que Neji no sabía qué hacer. – Sabes que es tradición de mi equipo comer ahí después de cualquier misión.

Él solo asintió, no estaba acostumbrado a esto. Era evidente que no era bueno del todo con las chicas. Sabía lo que era convivir con una o varias, pues entrenaba con Tenten, miembro importante en su equipo, además de entrenar con Hinata y Hanabi Hyuga, sus primas pertenecientes a la rama principal del clan Hyuga.

– Oye Neji-san... Deberíamos intercambiar platillos.

Expresó la peli café con emoción, tenía planeado probar el platillo que siempre pide Neji Hyuga y que él comiera el tazón que suele pedir con recurrencia.