𝕍𝕚𝕤𝕚𝕥𝕒𝕤 𝔼𝕤𝕡𝕠𝕣á𝕕𝕚𝕔𝕒𝕤 - 𝕋𝕤𝕦𝕟𝕒𝕕𝕖 𝕩 𝕆𝕣𝕠𝕔𝕙𝕚𝕞𝕒𝕣𝕦

Todo es por ella❣️

Debía admitirlo, tenía más de 45 minutos con la vista fija en un solo sitio. Una idea lo estaba atormentando desde hace tiempo, sin embargo, lo último sucedido con la rubia solo fue la gota que derramó el vaso.

Dejo escapar un gruñido frustrado.

Se levantó y emprendió camino hacia donde percibía el chakra de Jiraiya. El mismo conversaba tranquilamente con un tabernero, giro la cabeza extrañado y alerta cuando percibió la presencia de Orochimaru.

Salió velozmente, encontrándose ambos en la parte trasera del local. El albino lucia una capucha que impedía verle correctamente el rostro.

-¿Sucede algo malo? -Cuestionó con seriedad

-Si -Respondió apretando la mandíbula- Necesito hablar algo muy importante contigo

-¿Porque no esperaste a la noche?

-No quiero discutir esto con Tsunade serca, me arrancará la lengua antes de que diga dos palabras

El más alto asintió siguiendo a su compañero. No tardaron en desaparecer dentro del bosque.

-Bien, ¿Qué es lo que pasa, Orochimaru? -Preguntó cuando lo noto detenerse

-Yo... -El azabache repentinamente sintió la garganta seca- Necesito pedirte algo

-¿Que cosa?

-Jiraiya, necesito que seas pareja de Tsunade

El albino parpadeo un par de veces, cuestionandose a sí mismo si aquello estaba sucediendo realmente o si su audición debería ser revisada.

-¿Que?

-Al menos al ojo publico, por su seguridad -Orochimaru no lo miraba a los ojos, le resultaba sumamente incómodo tener que pedirle a su compañero semejante cosa- No me malinterpretes, se de lo fuerte que es Tsunade, pero, hay quien la ve desprotegida, una madre soltera, no quiero que ninguna este en peligro, y créeme que me siento como un maldito inútil de no poder hacer algo más por ahora, te lo pido a ti porque... -El Azabache suspiró y observó a Jiraiya- A fin de cuentas  eres al único al que le confiaría la vida de mis chicas...

Orochimaru había pasado gran parte de esos días pensando en que debía hacer ahora para procurar más seguridad para su mujer y su primogénita. Intentó callar vorazmente las voces que le gritaban que su presencia en la vida de la rubia solo le había traído complicaciones a la mujer... Aunque en el fondo sabía que tenían razón, desde que decidió dar un paso en aquella habitación que encerraba la gloria y le dio una oportunidad al sentimiento que hoy inunda su pecho supo que estaba realmente jodido, pero le fue imposible evitarlo...

Porque Tsunade era un ser especial. Uno de esos que eran escasos en el mundo, uno que se hundió en oscuridad durante un tiempo, pero, ahora luego de nutrirse de valor su brillo deslumbró a todo aquel que la observó.

Ella era una descarada qué no le sonreia a todo el mundo, porque sabe que no todo simple mortal resistirá a lo que implica una sonrisa en su bello rostro. Ella apreciaba sus propios placeres como una niña que goza una bolsa de golosinas. Ella era una mujer que tenía el coraje de levantarse siempre, por más herida que estuviera, para seguir luchando, porque nadie ni nada vencía a Tsunade Senju.

Ni siquiera él. Él ya había sido vencido por ella en cuanto posó sus ojos en ella de otra manera. Por eso y más Orochimaru no quería dejarla ir, cada fibra de su ser vibraba hacia esa mujer, y sabía perfectamente que perderla haría un bucle oscuro en su vida, un pozo del cual quizás no saldría nunca.

Jiraiya lo observaba seriamente. De por sí estar tan serca de Tsunade le resultaba complicado, esa misma mañana había encontrado el desayuno hecho y a ella afirmando que si no se lo comía todo sería un maldito malagradecido pero con una sonrisa que iluminó la habitación, ¿Es que acaso no se daba cuenta de que cada vez lo envolvía más? Tenerla bajo su techo y que le fuera prohibida, sin poder hacer más que imaginar las texturas de cada una de sus curvas. Y ahora esto, un favor que lo hundía incluso más allá de lo que ya estaba en el pozo de la zona de amigos, jamás podría intentar algo y traicionarlo, traicionar esa confianza.

Suspiró resignado, a fin de cuentas todo esto era por Tsunade y su bebé.

-Está bien, Orochimaru

-Gracias

-No me agradezcas -Sonrió- Todo es por ella, por cierto, ¿Lo hablaron?

-Si, realmente ella no estaba muy de acuerdo, está asqueada de tantas mentiras -El azabache suspiró- Pero, aún tenemos una conversación pendiente, ahora con la llegada de Hotaru tenemos que organizar mejor nuestras vidas, sobre todo con ese maldito hijo de puta que intento dañarla, quiero arrancarle los miembros uno a uno y hacer que se los coma mientras se desangra lentamente...

-No dejas de ser un psicópata -Mencionó el más alto- Pero tienes razón... Si tuviera al cabron de frente me faltarían puños para lastimar

El azabache asintió en silencio. Jiraiya metió las manos en sus bolsillos y miró el cielo.

-¿Porque te esfuerzas tanto, Orochimaru?

Los ojos olivas del más bajo brillaron.

-Es como tú dices, realmente me importa poco mi destino, he sido un gran hijo de perra, merezco morir y quemarme en el infierno por siempre, ya lo asimile y estoy bien con eso, pero, Tsunade me hizo entender que hay cosas que hacen que la vida valga más que simples ansias de poder -Explicó alzando levemente las comisuras de los labios- Ella merece ser feliz, y daré cada aliento de mi vida por lograrlo, aunque eso implique hacer cosas que no quiero

Ambos asintieron y se dieron las manos en un apretón que cello el trato.

-¿Eso es todo? -Preguntó el hombre de los sapos

-Bueno, también quiero dejarte algo muy claro, Jiraiya -El rostro de Orochimaru tomo una postura escalofriante- No quiero tus sucias manos sobre Tsunade por ningún motivo, este es un favor que encontraré como pagarte en un futuro, pero desde ahora te advierto que compartir techo no te da derecho a intentar nada con ella. Son mi mujer y mi hija, mías.

Jiraiya sonrió levemente.

-Ahora suenas como un tóxico

-Llamame como quieras, te tendré vigilado

Dos serpientes moradas subieron por la espalda de Jiraiya escondiendose en su despeinada cabellera sin que él se diera cuenta. Orochimaru confiaba en él, pero sabía el poder de las curvas de la Godaime, no tentaria a la suerte en esta ocasión.

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¡Hola!
¿Cómo les va, Guerrer@s de clase alta?

1058 palabras, el capitulo más largo que he escrito, pero me entró la inspiración y no logré resistirme.

Les advierto que me quedé sin wifi y es muy probable que desaparezca por un tiempo.

¿Les gusto el capitulo?

Las cosas se van a poner buenas 7w7

Quiero escuchar sus teorías.

Les doy gracias por votar, leer y comentar.

꒰⑅ᵕ༚ᵕ꒱˖♡ Los amo ♡˖꒰ᵕ༚ᵕ⑅꒱