Al descubierto 👁️👄👁️

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1...2...3 minutos pasaron y el albino permanecía inmóvil. Tsunade temblaba en su sitio, estaba completamente nerviosa.

-¿Porqué...? -Masculló al fín- ¿Cómo es que....? ¡Maldición! Esto no es posible

Estaba lo suficientemente confundido como para dudar incluso del suelo bajo sus pies. La conmoción y un sentimiento amargo invadieron su pecho, ¿Aquello realmente estaba pasando? ¿Su Tsunade se había metido con Orochimaru? ¿Él había sido capaz de hacerle algo así aún sabiendo de sus sentimientos por la rubia?. Le dieron náuseas y su rostro se pintó de furia.

-Jiraiya... -Intentó tocarlo pero él se quitó con brusquedad, como si el simple contacto con aquella suave piel lo quemará

-¡No, Tsunade! -Espetó encolerizado- ¡¿Cómo pudiste hacer algo así? ¡¿Meterte con Orochimaru?! ¡¿En qué demonios pensabas?!

-No hagas un drama, Jiraiya -Exclamó apretando la mandíbula- Hace mucho que lo perdonaste también

-¡No mezcles las cosas! Yo lo perdone, pero tú... ¡¿Te das cuenta de lo que hiciste?!

Ambas miradas chocaron, con un sinfín de emociones que no lograron terminár de sentir del todo.

-Es que, eso ni siquiera es lo peor, lo peor es que no confiaste en mí para decírmelo, ¡¿Cómo es posible que me tuve que enterar por terceros?! ¡¿Porque no me lo dijiste?!

-¡¿Realmente quieres saber porque?! -Ella le apuntó el rostro con el dedo índice, su rostro estaba descolocado por la furia- ¡Te lo diré! ¡¿Crees que es muy sencillo?! ¡Se lo que hice, no soy una maldita mocosa estúpida! ¡Y tu menos que nadie deberías estarme hablando así! ¡Tú eras la última persona que creí que me juzgaría! ¡Tú que te haces llamar mi amigo!...

El sabio de los sapos se pasó una mano por el cabello y dirigió la vida hacia la rubia, como si la admirara por primera vez. Sus puños cerrados, su mandíbula tensionada, sus ojos...

Oh no

Sus hermosos ojos miel llenos de lágrimas...

Todo su ser sufrió un cortocircuito, ahora fue él quien se sintió las piernas temblarle, Tsunade lloraba por su culpa, su corazón se oprimió, quiso retroceder en el tiempo y tragarse sus palabras aunque se envenenara al morderse la lengua. Avanzó a zancadas y la envolvió en sus brazos.

-Lo siento, lo siento mucho, Nena -Masculló contra su melena rubia, ahora él también lloraba- Soy un imbécil, un completo idiota, por favor disculpame...

La rubia gimoteaba aferrada a su pecho.

-Lo siento -Musitó ella- Lamento no haberte dicho nada

Él la estrecho un poco más fuerte, como nunca, cómo si por ese instante ella le perteneciera. Pero aquella ilusión apenas podía materializarse.

-No tengo nada que perdonarte -Masculló, aspirando el aroma de la mujer- Lamento haber reaccionado así, es solo que... Esto es mucho que asimilar

Aquel abrazo trajo consigo muchas cosas, la nostalgia de compartir con alguien a quien has amado toda al vida, o apoyarse en el hombro que siempre estuvo allí para que lloraras en él.  Era mucho.

-Tsunade -Jiraiya rompió el silencio- ¿Acaso... Orochimaru te obligó a algo?

Ella irguió la cabeza con rapidez.

-Dimelo, ¡Porque si esa serpiente traicionera te hizo algo juro que...!

-Él no me obligó a nada, tranquilo -Aseguró dando un paso hacia atras- si las cosas pasaron fue porque yo así lo quise

Un suspiro aliviado escapó de los labios del mayor.

-Tengo que hablar con él, ¿Lo entiendes, cierto?

Ella asintió.

-Le diré que vaya a verte en cuanto pueda

Tsunade le sonrió, y ese gesto bastó para derretirlo. Estaba en lo cierto, bastaba esa sonrisa para acabarlo, un rose de su piel le resultaría letal. Quería conservar aquel recuerdo, joder, detener todo allí mismo para no afrontar lo que venía.

Era una historia triste, porque ella jamás le pertenecerá, pero él siempre será suyo...

Hasta el último aliento.

𝕍𝕚𝕤𝕚𝕥𝕒𝕤 𝔼𝕤𝕡𝕠𝕣á𝕕𝕚𝕔𝕒𝕤 - 𝕋𝕤𝕦𝕟𝕒𝕕𝕖 𝕩 𝕆𝕣𝕠𝕔𝕙𝕚𝕞𝕒𝕣𝕦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora