El azabache entró por la ventana, Tsunade nota cierto nerviosismo en él.
-¿Que te paso? -Cuestionó terminando de doblar la ropa de su hija para meterla en el cajón de su ropero.
-Creo que mate un AMBU -Confezó por lo bajo
Ella abrió los ojos de sobre manera, una vena se marcó en su frente y Orochimaru trago saliva.
-¡¿Acaso eres imbécil?! -Espetó lanzándole un puñetazo- ¡¿Cómo matas un AMBU así como asi?! ¡Eres un inconsciente!
-¡No fue a propósito! -Se defendió- Además ni siquiera estoy seguro de que este muerto... Solo agonizante, pero de seguro se salva
Tsunade bufo con enojo. Orochimaru se rasco la cabeza y le extendió la caja que traía en la mano, pidiendo a quien lo escuchase que aquel regalo ablandara un poco el carácter de su explosiva mujer.
-¿Que es esto? -Tsunade frunció el ceño observando la bolsa
-Se que no estoy con ustedes todo el tiempo, y lo que pasó la noche que nació Hotaru me dejó claro que no puedo dejarlas así de desprotegidas, por eso quiero que tengan esto
Senju vio la caja con los ojos entrecerrados y luego a Orochimaru repitiendo la secuencia dos veces. Abrio la pequeña caja topándose con dos tobilleras, una dorada y una plateada que era mucho más pequeña que la otra.
-¿Tobilleras? -Exclamo alzando una ceja- ¿Para que es esto?
-Cellan un lazo -Explicó el azabache- Ambas están conectadas a mi, tienen parte de mi chakra y me ayudarán a saber si algo pasa con alguna de ustedes, en caso de que estén en peligro puedo rastrearlas
-Oh... -Admiró las joyas nuevamente
-Es difícil para mí sacar un lado paternal, rubia -Suspira- No tengo una base, nunca tuve ese ejemplo, pero realmente quiero ser un buen papá para Hotaru y ser digno de tu amor, espero que cuando veas esto recuerdes que he comprometido mi alma a la tuya y que mi vida les pertenece a ustedes ahora
Senju sonrió enternecida, le paso los brazos por el cuello, Orochimaru enrrosco los suyos en su cintura y depósito un casto beso en sus labios. Una probada simplemente, sonrió orgulloso cuando Tsunade se pasó la lengua por los labios.
-¿Más? -Preguntó con orgullo
-Más -Exclamo ella sabiendo que aún faltaban al menos dos horas para que Hotaru tuviera que comer otra vez
Las palidas manos la tomaron del trasero con firmeza, ambas lenguas danzaban con deseo. Desde tres meses antes de que naciera Hotaru Tsunade había mantenido el sexo fuera del menú, pero ahora, ahora debían recuperar el tiempo perdido.
-¡Que asco! -Chilló Jiraiya con el pomo de la puerta en su mano- ¡Por amor a Kami! ¡Que asco!
-¡¿Que no te dije que tocaras la maldita puerta antes de entrar?! -Espetó Orochimaru con el rostro rojo tanto de vergüenza como de furia
-¡No pensé que estarían besuqueandose! -Espetó el albino haciendo muecas
-¡Escribes porno! ¿Cómo es que esto te trauma!
-¡No es lo mismo! ¡Tsunade es mi fantasía hecha carne! ¡Me repugna la idea de que vas a profanarla bajo mi techo!
-¡Ya detenganse los dos! -Regañó la rubia cuando Hotaru comenzó a llorar- ¡Despertaron a Hotaru, descerebrados!
Ambos se vieron con los ojos en rendijas.
-Por cierto -Exclamó el albino regresando la vista a la rubia- ¿Porque había un AMBU desmayado en mi puerta?
Tsunade gruñó.
Orochimaru trago saliva.
Jiraiya río internamente por la paliza que se le avecinaba a su compañero.
Hotaru observó con curiosidad a los tres Sannin sin ser capaz de imaginar que aquel triángulo la rodearia durante toda su vida.
ESTÁS LEYENDO
𝕍𝕚𝕤𝕚𝕥𝕒𝕤 𝔼𝕤𝕡𝕠𝕣á𝕕𝕚𝕔𝕒𝕤 - 𝕋𝕤𝕦𝕟𝕒𝕕𝕖 𝕩 𝕆𝕣𝕠𝕔𝕙𝕚𝕞𝕒𝕣𝕦
RandomA veces los amores prohibidos son aquellos que más quiere ver el mundo. Adsurdo para algunos, extraño para muchos otros, pero interesante para cualquiera. Un amor que nace de un simple deseo carnal, porque luego de probarse su apetito solo aumento m...