Miedo 🌑

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Afuera el cielo se pintaba de tonos otoño. Había llegado de la oficina hace un par de horas, ese día en especial se sentía realmente agotada.

Un relajante baño de burbujas no le caería nada mal. Entró al baño, abrió la llave y comenzó a desvestirse. Cuando estuvo lista entró en el agua caliente, tomo una botella de jabón líquido y vacío una gran cantidad sobre el agua.

Pronto la bañera estuvo repleta de espuma blanca.

Tomo una esponja amarilla y comenzó a pasarla por sus brazos, miró hacia afuera de la bañera y nuevamente su mirada se perdió en el azulejo del piso.

Hace un poco más de ocho meses ella se encontraba sentada en el mismo piso... Lo recordaba, oh claro que sí, también recordaba haber hecho otras cinco para estar segura y casi haberse desmayado de al impresión.

Siguió con su baño hasta que anocheció. Cuando estuvo lista salió suavemente, se secó con una toalla blanca y se dirigió al armario. Saco una bata de pijama blanca, ropa interior y un par de medias largas con rayas verdes. Se vistió y se colocó el suéter por encima.

Se acercó al tocador para cepillar su cabello mojado y cuando terminó se sentó en la cama y prendió el televisor frente a ella.

Pasó varias horas con la atención puesta en el aparato hasta que sintió los párpados pesarle. Apagó el televisor con el control remoto y se arropó con las sábanas recostando la cabeza en la almohada.

Miró por la ventana a su derecha como comenzaba a llover hasta que el sueño la venció por completo.

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-Sigo sin estar de acuerdo con esto -Afirmó un pálido hombre de cabellos grises

-Me importa muy poco -Gruñó un pelirrojo un poco más alto que traía mala cara

-Puede salir mal, es la jodida Godaime -Recalcó el primero- Una legendaria Sannin y kunoichi de élite, me romperá como a una simple  varita de madera

-Tiene una jodida barriga más grande que tú cabeza, ¿Realmente te creés tan inútil como para no poder ganarle a una embarazada?

-No hables como si fuera cualquiera, es la maldita Tsunade Senju

-Siente pena por ti mismo luego -Le dijo el pelirrojo, frunciendo el ceño- Demuestra que lo que te cuelga entre las piernas no es sólo un adorno y cumple la misión

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Abrió los ojos abruptamente mientras daba un ligero respingo, lo que había comenzado como una simple lluvia ahora era una gran tormenta eléctrica. Se sentó en la cama mientras un trueno resonaba por la habitación.

El bebé comenzó a patearla sin parar, algo lo alteraba mucho, tanto que sus golpesitos le causaban un leve dolor a Tsunade.

Ella empezó a tallar su barriga para calmarlo, estaba por acostarse de nuevo cuando escucho un ruido proveniente del piso de abajo.

-Tranquilo, bebé... Mamá está aquí...

Espero algunos segundos sentada, extrañada por el ruido que acababa de oír, otro trueno la hizo saltar de sorpresa y provocó otra patada en su vientre.

-¿Que te ocurre, Cariño? ¿Porque estás tan inquieto?

Alzó el rostro al escuchar otro ruido, esta vez sonó más fuerte, como un golpe. Decidida quitó las sábanas que la cubrían para pararse cuidadosamente, miró el reloj sobre la mesa de al lado.

3:08am

Caminó sobre la madera fría asomando la cabeza por el pasillo. Se quedó allí esperando oír algo más.

Esta vez sonó algo, fue un golpe seco y luego el de algún objeto de vidrio romperse.

De seguro nuevamente Orochimaru había aparecido de madrugada y había tropezado con su linda vajilla -como ya había pasado antes- ,pensó. Poco a poco camino hacia las escaleras, todo estaba oscuro y los relámpagos eran lo único que alumbraba su camino.

-¡Orochimaru! ¡¿Eres tú?! -Gritó antes de bajar el primer escalón

Más no hubo respuesta alguna, su bebé comenzó a patearla nuevamente.

-¡¿Orochimaru?! -Preguntó otra vez

Recibió cómo respuesta otro ruido extraño, así que empezó a bajar escalón por escalón mientras se sostenía del barandal de madera.

-Si rompiste otro de mis platos juro que te haré limpiar tod... -Paró de hablar al llegar al fin de las escaleras y notar una figura oscura en el centro de su sala

Lo único que alumbraba la sala era la luz del fuego de la  chimenea... Tsunade sintió su corazón se acelerarse.

-¿Orochimaru? -Dijó con cautela

Algo anda mal, algo anda realmente mal, y por primera vez en mucho tiempo tuvo miedo, en su mayor parte por su retoño.

-Error

La luz de la casa se encendió dejando ver quien era esa figura. Un hombre alto delgado, un par de torcidos cuernos se asomaban por la parte trasera de su cabeza y sus ojos totalmente negros le daban un aire demoníaco.

Un gran trueno sonó por toda la casa mientras la rubia daba un paso hacia atrás, sin embargo un fuerte dolor de su vientre la hizo aferrarse al barandal.

Un ruido proveniente de entre sus piernas fue acompañado de un gran chorro saliendo de estas. Tsunade miró abajo, se le había roto la fuente.

-He venido por usted, Lady Tsunade

𝕍𝕚𝕤𝕚𝕥𝕒𝕤 𝔼𝕤𝕡𝕠𝕣á𝕕𝕚𝕔𝕒𝕤 - 𝕋𝕤𝕦𝕟𝕒𝕕𝕖 𝕩 𝕆𝕣𝕠𝕔𝕙𝕚𝕞𝕒𝕣𝕦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora