Capítulo 17

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Ella sintió el cuerpo de Christopher tensarse a su lado. Siempre le sucedía cuando se ponía nervioso en una situación tensa.

-Yo… -Christopher no tenía idea que mentira inventar, se le agotaban las ideas una a una. –Creo que me dejé llevar, ya sabes, la música, las luces no lo sé, la situación –dijo él mientras sus manos sudaban del nerviosismo y su corazón latía fuerte –estabas muy linda esa noche y ya sabes… lo siento, actué como un idi0ta.

-No te preocupes Christopher, por si te diste cuenta, estaba a punto de seguirte el beso, así que no eres el único culpable –dijo ella con relajación. Christopher sintió un escalofrío recorrer su cuerpo.

-Sí, pero olvidemos esa noche, es pasado –dijo Christopher sonando seguro, pero sabía que no iba a olvidarla fácilmente, pues había sido la noche en que casi triunfo, y que de un segundo a otro le arrebataron a su chica.

Al día siguiente, Dulce tenía que ir a su hogar a buscar ropa y probablemente se encontraría con su madre, así que Christopher se ofreció para estar con ella. Pero se negó, diciendo que los problemas tenía que resolverlos ella esta vez.

Así que finalmente, su madre y ella se “arreglaron”, Christopher sabía que era temporal, pero prefirió seguirle la corriente. Y bueno, con el pasar de los días la tortura de Christopher se fue intensificando poco a poco. Ella y Jack hacían todo juntos, aunque ya no pasaba a recogerla, pues ella le había dejado claro que su mejor amigo pasaba por ella.

-¿Ya dejaste de tirarte a Smith? –preguntó Alfonso con una sonrisa malévola

-Olvidemos la apuesta Alfonso, no quiero ocupar tu moto por una estúpida y absurda apuesta –susurró Christopher. Alfonso suspiró.

-¿Intentando remendar los errores para enamorar a tu chica? –preguntó Alfonso. Christopher asintió. –está con Jack ¿cierto? –Christopher asintió de nuevo –oh, es un golpe bajo.

-Ni me lo recuerdes, gracias –dijo Christopher de forma irónica.

-No te la tomes conmigo hermano, yo sé que puedes conseguirla, pero realmente debes esforzarte –dijo Alfonso ahora más serio. –si realmente la amas, lo lograrás.

-Eso espero, no quiero tener que seguir sufriendo otro montón de años. –Dijo Christopher –soy un cursi lo sé, pero de verdad la amo.

-No eres cursi amigo, yo recién estoy comenzando y Anahí ya me tiene arrastrándome por ella –ambos sonrieron –no te preocupes, sé que ella te elegirá a ti de todas formas.

-¿Cómo lo sabes? –preguntó Christopher

-Piénsalo. ¿A quién recurre Dulce cuando tiene problemas? –Christopher suspiró -¿quién es el que la acompaña? ¿A quién llama primero cada navidad y año nuevo?

-Yo –susurró Christopher. Alfonso le dio una sonrisa

-Viste, ella pronto se dará cuenta, cuando el imbécil de Jack le haga cualquier cosa, o la decepcione, ella se percatará de que la mejor opción ha estado ahí, todo lo que ella quiere está bajo su nariz –dijo Alfonso sonriendo. Christopher asintió más optimista. Quizás Alfonso tenía razón.

Pero luego de ese día comenzó a dudar. ¿La razón?...

-Christopher –dijo ella con una enorme sonrisa mientras lo abrazaba.

-Hola princesa ¿cómo has estado? –preguntó a su mejor amiga mientras pasaba los brazos alrededor del su delgado cuerpo.

-¡Genial! Tengo algo que contarte –dijo con una sincera sonrisa.

-¿Qué pasa? –preguntó Christopher

-Es que… Jack y yo somos novios –dijo con un saltito. Christopher la miró serio durante un momento. Luego le sonrió lo mejor que pudo, aunque esa sonrisa no tenía nada de real, hasta ella que no era muy buena dándose cuenta de lo que Christopher hacía, se percató.

ɦσω τσ ɩσɣɛDonde viven las historias. Descúbrelo ahora