El Nerd Más Sexy

Capítulo 39

Siento los rayos del sol en mi cara y me despierto. Veo a Kacchan, es tan lindo cuando duerme. Me quedé mirándolo por varios minutos.

—Deja de mirarme nerd —escuché decir a Kacchan y abrió los ojos. No pude evitar sonrojarme—. ¿Tanto te gusto?

—Claro, eres mi futuro esposo... —mire a otro lado porque sentí vergüenza.

Sentí sus brazos rodear mi cintura y me dio un beso en la frente.

—Te amo tanto nerd —sonreí tontamente.

—Yo también —le di un beso en el pecho.

—¿Quieres ir a desayunar afuera? —preguntó y se sentó.

—Sí, me parece bien.

—¿Quieres que nos bañemos juntos? —preguntó mientras me mira y se relamió los labios.

—Está bien —dije y me levante de la cama, igual que kacchan. Buscamos nuestras toallas y entramos al baño.

Me quite el suéter y el pantalón que tenía puesto y Kacchan hizo lo mismo. Me quite el bóxer y él se me quedó viendo.

—¿Qué miras? —pregunté.

—Solo miro el hermoso cuerpo de mi novio —se bajó el bóxer—. ¿Entramos?

Abrí la regadera, y el agua empezó a caer sobre mi rostro, sentí como Kacchan pego su cuerpo con el mío. Empezó a acariciarme los brazos y me dio varios besos en la espalda.

—Kacchan, te lavaré la espalda —empecé a ponerle jabón en la espalda, luego él se puso en el chorro para que el agua le quitara el jabón.

Varios minutos después, salimos del baño y nos vestimos. Agarre mi celular y mi billetera, Kacchan hizo lo mismo. Se dirigió a la mesa y agarro las llaves y abrimos la puerta, luego la cerró y fuimos hacia el auto y nos subimos. Encendió el motor para así irnos, luego de unos minutos estacionó en un restaurante, bajamos y entramos. Nos sentamos en una mesa, un mesero fue hacia nosotros y nos dio el menú. Luego de unos minutos, pedimos nuestra comida.

—Este lugar es lindo —comenté.

—Sí, hace rato que no venía a comer aquí, te lo aseguro, la comida de aquí es muy buena.

—¿Haz venido a comer aquí? —pregunté.

—Sí, vine varias veces aquí con Kirishima —respondió.

—Ah, que bueno. Por cierto, ¿no crees que deberíamos de tener nuestra propia casa? —pregunté algo nervioso.

—¿Una casa? Claro que sí, ya compre una.

—¿Desde cuándo? —pregunté sorprendido.

—Es un secreto. Te lo iba a decir, pero te adelantaste compré una casa porque quiero vivir contigo toda mi vida en un lugar muy lindo al que podamos llamarle hogar ¿y tú? —preguntó con un tono de curiosidad.

—Eh... Sí, pienso lo mismo que tú —dije nervioso.

No puedo decirle que también es porque tendremos un bebé.

<<Seguramente es más por el bebé que tendremos, me pregunto cuándo me lo dirá, espero que sea pronto>>, pensó Bakugo.

—Que bueno amor —dijo y llego la comida.

Los dos empezamos a comer y después de una hora salimos del lugar y nos dirigimos a casa. Nos cambiamos de ropa y nos quedamos acostados en la cama mientras nos abrazamos.

—Kacchan, ¿qué dirías si te dijera que es posible que tengamos un bebé? —pregunté con algo de miedo.

—Pues, te diría que sería el mejor regalo que podrías darme, estaría muy feliz ya que sería papá —me dio un beso en la frente.