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¿Que iba a hacer si su hermano estaba muerto? ¿Lo estaba? ¿Que pasaba dentro?

Horacio tenía miedo de perder a su hermano, había escuchado todo por la radio y no sabía la situación de dentro.

Estaba cansado de esperar ahí arriba, quería bajar y ayudar a sus amigos en todo lo que hiciera falta.

Pero también sabía que estaba en horas de trabajo y que él no era precisamente quien estaba al mando. Sabía que tal vez al querer ayudar podría echar a perder algo por lo que sus compañeros del cuerpo de policía trabajaron meses.

Los minutos pasaban mas lento de lo normal, su respiración era pesada pero rápida tenía intriga de saber todo lo que pasaba.

-Estamos listos, llamen a una ambulancia y entren a por él - se escuchó en la radio, era Yun

Todo el aire que tenían en sus pulmones salió disparado, habían logrado capturar al objetivo, con algunos problemas al final; perl se habían llevado una victoria.

Horacio rápidamente bajo de aquel techo y se metió a la casa, en busca de sus amigos.

Al entrar a la habitación se encontró con Gustabo tirado en el suelo, Freddy sentado a un lado y Yun dándoles algo en la mano.

-¿Cómo están? - preguntó acercándose a ellos

-De puta madre, tirito en el hombro y Gus en una pierna - respondió alegre Freddy

-¿Estás feliz por un tiro? - interrogó incrédulo Yun

-Estoy feliz porque Gus se llevo un tiro en la pierna, lo llevaran al hospital y tendrá que estar cojo una semana. Como yo aquella vez, es mi momento de llamarle "anciano cojo" - explicó mientras hacía comillas con sus manos, quejándose un poco por el dolor en el hombro

-Por lo menos podré disparar, no como otros. Me arde - se quejó el rubio

-Es normal, ya vienen los sanitarios, no llores - soltó Yun

-Ustedes son una puta broma, tienen un tiro en la pierna y uno en el hombro y están como si nada, raros - bramó el crestas

-Calla que luego empieza a quejarse este loco - murmuro Gustabo

Freddy iba a quejarse pero justo entraron los EMS, no iba a arruinar su imágen frente a ellos así que solo guardo silencio.

Horacio no quería ver como curaban a sus amigos, ya de había informado de sus estado y sabía que no tenía porque preocuparse.
Salió de aquella casa y se encontró con el comisario.

-Ha salido todo bien, solo tus personas salieron heridas, las mías se llevaron tiros en el chaleco. Moretones por una semana - sonrió

-Me alegra que haya salido bien, los curan y nos vamos, el informe lo redactaremos y será enviado a su oficina - explicó Horacio

-Perfecto, no hay prisa así que con calma, muchas gracias por haberme ayudado. Si necesitan transporte me avisan por radio - dijo y se fue

Todos estaban alegres, había salido casi perfecto y eso se celebraba. Dudaba en que sus amigos pudieran tomar alcohol en su estado, así que de seguro se iba a quedar para después.

Tomó su móvil y llamo a Conway.

-Terminado - informó

-Perfecto, les mando a Armando, quédense ahí - dijo para después colgar

Después de todo su trabajo no era tan malo como pensaba algunos días. Trabajar en conjunto no siempre estaba mal.

¿Militar Yo? | VolkacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora