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-Coronel los tenemos en el rio de las dos montañas, el coronel Freddy tiene las coordenadas -

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Horas antes:

El coronel se encontraba listo a las cuatro de la mañana, iban a ir a hacer rondas alrededor de todos los lugares anteriores donde lo habían estado haciendo la semana y el día que los cadetes se encontraban secuestrados, no había pistas, rastro y los secuestradores no pedían nada por ellos, no sabían para que los habían tomado y mucho menos cuanto tiempo más los tendrían así.

-Estamos listos para salir, a su orden - dijo Segis 

El secuestro de sus compañeros les había sentado mal a todos, Segismundo ya casi no bromeaba, ya no era el mismo; solo se centraba en manejar y estar alerta para ver si lograba localizar a sus amigos. James trataba de animar a los demás, sin embargo también se encontraba preocupado, Greco había cambiado mucho en esa semana, estaba más centrado en él y en buscar a sus amigos, Jacob se había vuelto aún más serio de lo que ya era, y todos se mantenían en pie solo por dos personas a las cuales extrañaban. 

Horacio no era la excepción se había vuelto más serio, frío, malhumorado y su paciencia se agotaba cada vez más rápido, a pesar de todo también se sentía triste, por no haber podido ayudar a su cadete en tal situación; solo quería encontrarlo y hacer que jamás pasara por algo así de nuevo. 

-Nos vamos, vas al frente - le dijo a Segis 

Todos se encontraban equipados, la carabina, sus chalecos, radios y demás equipo necesario por si daban con ellos, de igual manera la policía le ayudaba y se encontraban con refuerzos en el aire.

En cuanto estaban a mitad de camino la radio sonó. 

-Aquí Roberth, reemplazo a Leonidas y tomo la unidad pegasus, cambio - 

Cuando el comisario se entero del secuestro de su hijo se mantuvo calmado al recibir la noticia, pero poco después de aquella reunión Horacio se lo había encontrado llorando en los pasillos de su comisaría, estaba claro que de alguna manera se sentía culpable por haberle dado tal caso sin pensar bien las cosas primero. 

El sol comenzaba a salir y con ellos la claridad del día se hacía presente, la madrugaba fresca poco a poco se esfumaba y daba paso al caluros día, el cual no era impedimento para que todos siguieran con su búsqueda. 

Segis iba a la cabeza, el era el que decía que partes se iban a revisar, cuales habían sido revisadas en la madrugada antes de que ellos, cuales tenían prioridad, a cada uno le tocaba hacer esa actividad por día, así que poco a poco todos los cadetes se aprendieron zonas cruciales de la ciudad. 

Playa, bosque, lagos, ríos, acantilados, montañas, casas abandonadas, fábricas en remodelación/ abandonadas, avisos simples de la policía, iban a todos y cada uno de esos lugares, sin embargo nunca dieron con los cadetes. El día se les fue sin más, con lo mismo de la semana, sin noticias. 

Las horas habían pasado y eran las seis de la tarde, estaban listos para volver a la base para descasar una hora como lo hacían algunas veces, también iban a echar gasolina, de vez en cuando hablaban con la policía sobre los avisos, hacían un sin fin de cosas para poder ver a sus amigos otra vez.

-Nos vamos de regreso a la base, ¿alguien se queda? - preguntó el coronel 

-¿El comisario necesitara ayuda? Porque puedo quedarme con el sin ningún problema - dijo Jacob 

-Puedo preguntar - 

El pelinegro asintió y el cresta habló por la radio para cuestionar al comisario 

¿Militar Yo? | VolkacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora