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Los juegos habían terminado y las puntuaciones eran algo decepcionantes para el equipo de los Mayores.

Habían quedado siete a tres, con favor al equipo de los superiores.

-Igual no es tan malo, nosotros quedábamos diez a cero, es un avance no te conviertas en Conway - dijo Horacio

Él había notado que el equipo tenía el potencial pero aún así competían contra ellos que no dejaban de ser los mejores de aquella base, la práctica estaba un poco desequilibrada.

A pesar de que le gustaba ver la cara del ruso frustrado sabía no le iba a durar mucho. Con cada juego se le notaban más las ganas de vencerle e iban siempre uno por el otro. Ver como se rascaba la ceja al final de juego o ver como rodaba los ojos cuando levantaba su bandera era de lo más divertido para él.

-Bien, vayan a dejar las carabinas y vayan a dormir un poco. Les aviso también de que ya no van a entrenar con los demás cadetes, serán entrenados única y exclusivamente por nosotros. Los vemos por la tarde, pueden ir a descansar - indico Gustabo

Los seis cadetes se retiraron a su dormitorio, eran las seis en punto de la mañana, ellos entraban y sus demás compañeros se levantaban para comenzar a entrenar.

Se encontraban en el baño, listos para una ducha y después dormir la mayor parte del día, el cuerpo del ruso ya se encontraba seco, sin embargo al tocarse se sentía frío, sus botas habían acumulado la suficiente agua como para dejarle los dedos arrugados, como si de una pasita se tratase.

-Eres un anciano - dijo Segis al ver los pies de su compañero

Viktor no dijo nada y solo esbozó una sonrisa, sabía que se estaba burlando de él, sin embargo para el también era gracioso ver sus dedos de tal forma.

-Llevamos un día y ya estoy harto, mis dedos parecen sus abuelas - comentó Jacob

-¿Podrías dejar a nuestras abuelas un rato? - se quejo Greco

-Vale, perdón. Me siento del asco, que eran las dos de la mañana cuando nos levantaron - se quejo

-Ni siquiera vi la hora, estaba en modo zombie - dijo Viktor

Los seis se metieron a las duchas, el ruso estaban tan cansado que ni siquiera le importo que sus amigos le vieran desnudo, después de tantos meses de irse a dormir tarde para ducharse y que nadie lo viera ahora entendía que había sido una perdida de tiempo.

No duro mucho en las duchas, fue rápido, no necesitaba estar otra hora más de pie. Salió de los baños con la toalla en la cintura y una vez que llego a su cama con cuidado se puso la ropa, claro, cuidando de que nadie viera más allá de la toalla.

Una vez listo se acostó en su cama, la sentía de lo más rico, era como estar en las nubes, tenía que aprovechar para dormir ya que quería levantarse a una buena hora para poder ir a hablar con el General Conway, no quería formar parte del equipo y mucho menos sr oficialmente un militar.

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-¿Crees que Conway le de el permiso para salirse del equipo? - cuestiono Horacio a su amigo de rastas

Si bien era cierto que se trataba de trabajo no podía dejar de pensar en que se iba a alejar de aquella persona que tanto le atraía.

-No se Horacio, es complicado, si dices que es hijo del Comisario puede que logre salirse del equipo - dijo con total sinceridad su compañero

Quería conquistar a es pequeño ruso, pero no sabía del todo como hacerlo, sabía que le gustaban ciertas cosas pero no buscaba como acercarse a él en un situación meramente laboral.

-No entiendo porque estás tan al pendiente de él, sabes que Gustabo te va a dejar esposado dos días bajo la lluvia para que se te quite la idea loca que de seguro traes en la cabeza - comentó Lamar

El ruso no sería la primera vez que Horacio hiciera algo así, había una lista larga en cuanto conquistas dentro del cuerpo, algunas peores que otras pero sin duda ahí estaban.

-No creo que mi hermano haga algo así - dijo mordiendo su labio

-Bueno, si tu hermano no lo hace lo hará tu padre, y si él tampoco es capaz pues tendremos que hacerlos tus compañeros de equipo - sonrió de una forma chistosa

«Tal vez esta vez es diferente, yo me llevo las llamadas de atención.» pensó

No debía de generar más problemas dentro del cuerpo o con su equipo y su padre, pero Viktor se le hacía demasiado guapo y tal vez. solo tal vez de ahí podía surgir algo que jamás había sentido, era cuestión de tiempo.
















-Akira-Sakata- muchas gracias por haber comentado en el anterior capítulo, espero te haya gustado, un abrazo<3

Lia

¿Militar Yo? | VolkacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora