47

990 142 29
                                    

Las semanas pasaban y con ellas la relación del cadete con el coronel se hacía cada vez más estrecha, cada vez hablaban más, cada vez habían más encuentros para anécdotas o para simplemente hablar, también habían besos, robados, con permiso, volados, los coqueteos entre los dos habían incrementado al igual que su atracción el uno por el otro. 

En las ocho semanas que habían pasado el ruso había ido a campo, a hacer cosas relativamente fáciles, uno que otro disturbio, acudió a una persecución en helicóptero, hizo uno que otro operativo, vio a sus papás un par de horas antes de regresar a su base. 

Sin duda en los dos meses que habían pasado había crecido en muchos aspectos, era el segundo mejor en su equipo y todos su amigos se encontraban verdaderamente orgullosos. 

-Te dije que ibas a poder - el moreno se acercó, lo tomo de la cintura y le dio un beso 

-No deberías hacer eso en medio del patio, ten más cuidado Horacio - 

Sin duda le gustaba que le besara, pero no en medio de todo, donde es podía ver un rango más alto y sancionarlos. 

-¿Miedo? - pregunto el moreno jugando 

-Cuido tu trabajo y el mío, bobo - le pego muy despacio en el hombro 

-Se me va a caer eh - alzó las cejas 

El moreno vio como el semblante del ruso había cambiado a uno serio, mostrando respecto y cierta distancia. 

-Te estamos buscando hace media hora Coronel, ¿sería tan amable de mover su trasero a la junta en donde todos estamos trabajando? - 

Se trataba de Ivanov, hace tan solo una semana había llegado a la base por pedido de Conway para una misión, pero siempre se encontraba detrás del moreno, cosa que le causaba celos al ruso. Horacio le había explicado que solo era un viejo compañero, que habían pasado ciertas cosas entre ellos pero que al final había se había ido. 

El ruso no podía mostrar inconformidad ya que no eran nada y mucho menos se iba a poner a pelear con un rango mayor, no tenía ese derecho y dudaba en poder tenerlo algún día. Sin embargo, eso no le impedía no ponerse celoso, pasaban por un proceso amoroso y claro que se encelaba algunas veces. 

-Si voy, te sigo - dijo para acercarse al ruso de manera que quedara a un lado de el, paso su mano por detrás y apretó levemente su trasero en cuanto Ivanov se dio la vuelta 

-¡Oye! - se quejo el ruso 

Eso era algo que últimamente se hacían mutuamente, era como una broma entre ellos 

-Nada, deja de poner esa cara cada que vez a Alexander, eres muy obvio - sonrió para después lanzarle un beso e ir detrás de quien había ido por el. 

El ruso se fue con sus amigos quienes estaba en la cafetería ya que ellos entrenaban con las fuerzas especiales que en esos momentos se encontraban en una junta para su próxima misión. 

Al llegar a la mesa en donde estaban los demás se sentó y dejo salir un suspiro. 

-Estas muy enamorado, cúrate ahora o te vamos a perder - habló Segis 

-No lo estoy - mintió 

La atracción se había transformado en algo más después de tantas semanas de atención, de buenos tratos, de risas y demás cosas lindas con el coronel. 

-Si lo estás te hemos perdido en la batalla. Te meteré dos tiros y le diré a tus padres que caíste en el campo - murmuro de nuevo el gallego 

Al poco rato llegó Greco, quien no se veía de buen humor

¿Militar Yo? | VolkacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora