¿Militar Yo? | Volkacio

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Era de madrugada, casi las dos para ser exactos, hacía mucho frío ya que llovía, para esas fechas era muy común que lloviera, así como también lo que el grupo de mayores iba a hacer. 

El equipo de Horacio se encontraba yendo hacía los dormitorios, dispuestos a comenzar su entrenamiento con los de la lista, eran los que se les habían asignado a ellos así que no iban a desaprovechar cualquier oportunidad para entrenarles. 

Iban a entrenarles lo más duro que la ley se les permitía, estaba claro que tenían que ser igual o mejor que ellos mismos, iban a impresionar a Jack; de eso estaban seguros. 

Una vez llegaron a los dormitorios abrieron la puerta y prendieron las luces de aquel domo, haciendo que todos se levantaran en pijamas a formarse como regularmente lo hacían. 

-Bien, personas que mencione, personas que se para aquí al frente, así este en pelotas - habló Gustabo

Todos asintieron y sin más comenzó a cantar los nombres y de uno en uno se iban presentado al frente, para suerte de todos los de la lista ninguno estaba en pelotas, pero si con shorts y una camisa muy delgada, la cual no les iba a cubrir de la lluvia y mucho menos de aquel frío. 

Ninguno de los seis que estaba al frente entendía de que se trataba, pero eran ordenes y tenían que seguirlas, al final se encontraban en un campo lleno de militares y de rangos mucho más altos que ellos, había que acatar las ordenes dadas. 

-Bien, son todos, van a ponerse las botas y se dirigirán a la armería, los vemos en el campo en cinco, ni más ni menos y quien se tarde aún más se va a limpiar los baños junto con el Mayor Kalahari - habló Freddy

-¿Que putas? - susurro Viktor hacia su amigo el barbas 

-No se, pero mueve el culo que no creo que estén bromeando - murmuro de vuelta

Los dos regresaron hacía sus camas para rápidamente ponerse sus botas. En cuanto la puerta se escucho cerrarse todos los del dormitorio regresaron a sus camas, algunos a dormir de nuevo y otros a cuchichear sobre el porque los habían llamado. 

Los seis se pusieron las botas y salieron casi corriendo de aquel lugar para dirigirse a la armería y una vez ahí vieron a Paola, quien se encargaba de entregar las armas de alto calibre con las que entrenaban. 

-Buenas, me dijeron que les entregara una carabina, son seis, se las voy pasando, están sin balas aún así por favor verificar - explico 

Y así paso las seis carabinas, cada uno del grupo comprobaba que ninguna estuviera cargada, pues para ese punto ya se olían que iban a entrenar. 

Todos les dieron las gracias a la encargada y se retiraron corriendo hacia el campo que suponían era el principal. Esta vez el aire fue más frío que cuando salieron de su dormitorio para ir a la armería, sentían como su piel se erizaba por el mismo, sus cuerpos poco a poco se iban a acostumbrar pero sin duda les iba a costar. 

Ya formados frente a sus mayores saludaron. 

-Descansen, no hacía falta. Bien nenes, están aquí por algo y tenemos la dicha de darles la gran noticia, que no es pregunta es una afirmación - sonrió Horacio 

-Bien, como sabrán ustedes están aquí por algunos favores a sus padres, por ser unos grandes niños tan educados como siempre, sanos sobre todo - rio Freddy 

-Y como están en una posición donde no pueden escoger que hacer, han sido elegidos por el departamento para entre los seis formar un equipo de élite, el cual será entrenado exclusivamente por nosotros - explico Gustabo 

La cara de Viktor cambio totalmente, el esperaba salir de ese lugar para Febrero, no esperaba en convertirse en algo de élite  una mierda así, estaba listo para regresar a su vida normal después de haber pasado tanto tiempo en ese lugar. 

-Disculpe Mayor pero, yo no quiero forma parte del ejército, así que supongo que puedo presentar algo no se, un escrito para retirarme de dicho equipo - hablo el ruso

Freddy y Gustabo rieron. 

-Claro, puede presentar un escrito y llevarlo a la oficina del General Conway, pero dudo mucho que se le sea aceptado, en especial su caso ya que no esta aquí por su propio pie, si embargo tampoco pierde nada en pedir explicaciones - comentó Lamar 

Horacio solo se quedaba viendo al cadete, estaba claro que no se iba a poder librar de ser un militar en toda la extensión de la palabra. 

-Bien, si dicho escrito será presentado lo hará por la mañana y como dudo que sea revocada la orden tiene que entrenar; y todos empiezan hoy, así que usted también tendrá que hacerlo - explico Horacio 

-Bien nenas, treinta vueltas al lugar, ni más ni menos, saben la posición de la carabina - dijo Gustabo para soplar un silbato en forma de polla el cual se lo había regalado su hermano Horacio. 

-No puede ser, donde lo has comprado es lo mejor que he visto en el ejercito - dijo Lamar para después reír al ver como el rubio lo soplaba 

-Me lo ha dado Horacio, es la mejor cosa que han dado jamás, pero lo tengo que tapar con toda la mano para seguir siendo respetado en este jodido lugar - arrugo la nariz

-Ya, normal. Voy por unas cosas a la bodega Mayor sopla pollas - se paró frente al rubio y saludó como lo hacia con sus altos mandos

Los demás se encontraba viendo que sus ahora alumnos dieran las vueltas necesarias ara seguir después con el demás entrenamiento, no iba a durar mucho ya que los iban a  dejar descansar, pero no se lo iban a dejar fácil. Los iban a entrenar como el General Conway lo había hecho con ellos.