C30. "Dependiente"

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Narra Nickolas:

Observé un momento más a mi hermano, este seguía dormido pacificamente en el suelo, parecía tan tranquilo, nada podía molestarlo aún y claro... se había fumado como 11 porros míos, como no iba a estarlo?.

—Vas a tenerme que pagar estas mierdas con el sueldo de tu maldita serie, idiota.— me levanté de ahí y pronto empecé a recoger los restos de ceniza y de papel a lado de el.

Una vez terminé de hacerlo, tomé el cuerpo de este con fuerza y lo llevé al baño. Debía hacer que de alguna manera se le quitara lo malditamente drogado, es decir, no podía ni mantenerse en pie.

Lo puse en la bañera sin siquiera quitarle aquel ridiculo traje y prendí el agua helada, al notar que tardaría mucho aquello gruñí, sin embargo decidí prender la regadera, este gimió abriendo los ojos de inmediato al sentir las gotas de lluvia artificial caer en el.

—Está fría! Está fría!.— gimió intentando salir pero lo evité. —N-ick... está fria!.— sin más apagué la regadera, este tembló un poco al notar el agua de la llave que aun seguía llenando la bañera mojando su trasero y parte de sus piernas.

—Esto te pasa por fumarte casi todos mis malditos porros, en que mierda pensabas?!.— dije alterado.

El me miró unos momentos sin saber que decir pero al final lo hizo. Habló.

—T-tu dijiste aquella vez en la cabaña que... que fumando un porro se me quitaría lo estresado y yo... yo estaba...— lo interrumpí riendo.

—Estresado de que? De ponerme en ridiculo con todo el puto mundo hoy? De eso estás estresado?.— alcé ambas cejas.

—Yo no quería causarte problemas, nick... yo solo quería llevarte el almuerzo sin que alguien me viera pero unas chicas me pidieron unas fotos y ellas dispersaron que yo me encontraba ahí... realmente mi intensión nunca fue molestarte.— susurró cabizbajo.

Me quedé en silencio unos momentos, tomé el shampoo y se lo pasé.

—Bañate... iré a ver como hacer que el maldito olor a porro se vaya.— me levanté del lado de la bañera pero al hacerlo sentí el agarre de el en mi mano, acto que me impidió seguir.

—Es-estamos bien?.— preguntó.

—No... mientras no me pagues todos mis malditos porros no estamos bien.— dije alzando mi ceja. El hizo un pucherito sin embargo miró hacia al frente notando como la agua seguía llenando la bañera. —Date prisa.— dije saliendo de ahí.

Una vez que estuve abajo intenté deshacerme de aquel maldito olor pero estaba siendo imposible.

Pronto noté como la puerta fue abierta, papá y lauren entraron por esta, papá suspiró al verme pero lauren solo tenía lagrimas en los ojos. Rodeé los ojos en tal caso. Era pátetica sin necesidad de intentarlo.

—La casa huele muy extraño.— dijo ella mirando alrededor.

—Si, como sea... aidan llegó, está arriba tomando un baño.— solté tomando asiento en el sillón mientras sacaba mi celular.

Rápido sentí que alguien me lo arrebató, al instante me levante del sofá para encararla.

—Que mierda te ocurre? Devuelveme eso.— quise quitarselo pero ella lo alejó de mi.

—Porqué no nos avisaste que el había llegado?! Acaso te encanta vernos sufrir?! Es eso?!.— gritó, la miré serio y en silencio mientras ella esperaba una respuesta de parte mia que obviamente no iba a darle.

—Hijo...— la suave voz de papá me habló, lo miré de igual manera que a mamá.  —... debiste avisarnos, tu madre estaba preocupada.— dijo acercándose a nosotros.

𝓣𝔀𝓸 𝓔𝓵𝓮𝓶𝓮𝓷𝓽𝓼 [𝓖𝓮𝓶𝓮𝓵𝓸𝓼 𝓖𝓪𝓵𝓵𝓪𝓰𝓱𝓮𝓻] 1𝓣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora