A veces me pregunto si vale la pena luchar por amor, pero después recuerdo tu rostro y estoy preparado para la guerra.
Narra Rose.
Han pasado ya dos días desde que Marcus despertó. Hoy lo dan de alta y hemos preparado una fiesta de bienvenida para él y para Luciano, que también lo dan hoy de alta.
Tuvimos que decirle la verdad a los niños, bueno, no explícita, simplemente que su abuelo y su tío estaban en el hospital. Vinieron ayer para verlos y hoy están ya en el restaurante, esperando por nosotros.
Todos estamos esperando que entreguen a Marcus, hasta que vemos venir tanto a Marcus como a Luciano en sillas de ruedas, siendo traídos por dos enfermeros. Cuando los dejan frente a nosotros, ambos se levantan. Mi esposo me mira solo a mí y yo a él. No tengo ojos para nadie más que no sea él.
Los enfermeros se van, llevándose las sillas de ruedas y yo me dispongo a abrazar a mi esposo. Me devuelve el abrazo enseguida.
Subimos a los autos para ir hacia donde será la fiesta. Hemos rentado un restaurante de estilo vintage que tanto le gusta a Marcus. Cuando entramos, todo está decorado con globos, carteles de bienvenida y nuestra enorme familia nos recibe alegres. A Marcus le importa poco que acaba de ser dado de alta y cuando Jordy corre hacia sus brazos, él lo alza y le da su respectiva vuelta.
Todos se nos acercan para ir abrazando y demás a Marcus y Luciano. Yo no me separó de Marcus en ningún momento. De verdad no pienso alejarme de él más nunca. Ya me estoy imaginando yendo con él a la empresa, al baño, a buscar a los niños, a todo, pero no pienso dejarlo solo nunca más.
—La mia regina —susurra de pronto. Pestañeo un poco antes de enfocar mi vista en él y sonreír.
—Il mio re —respondo. Su sonrisa crece.
—¿Quieres que nos sentemos? ¿Te sientes bien? ¿Quieres comer algo? ¿Agua, jugo, batido? —pregunta una cosa tras otra, haciendo que mi corazón se hinche de alegría. Inmediatamente se me humedecen los ojos.
¡Benditas hormonas!
—Estoy bien, mi rey. Es solo que no quiero soltarte —confieso. Mis ojos se llenan más de lágrimas acumuladas y él se endereza para verme mejor. Aleja el cabello de mi rostro y sujeta mis mejillas con ternura.
—No quiero que lo hagas, la mia regina. Nunca voy a dejarte —promete y me besa. Sonrío en sus labios al separarnos y caminamos hasta una mesa.
El día pasa tranquilo con los niños y demás comiendo, riendo y haciendo que tanto Luciano como Marcus, rían en todo momento. Yo me he mantenido sentada junto a mí esposo sin hacer gran cosa. Por mi mente no deja de rondar la pregunta de: ¿Qué dirán los niños cuando se enteren de mi embarazo? Porque aún no se lo hemos dicho.
Tengo pensado explicarles cuando regresemos a Italia. No lo sé, buscar la mejor manera de hacerlo. Es que sigo sin entender porqué estoy tan nerviosa con su reacción.
Cuando llega la hora de volver al hotel, ya son casi las siete de la noche y todos estamos más que cansados. Yo estoy acostumbrándome de nuevo a los síntomas del embarazo. Ahora que ya sé que no es psicológico, estoy esperando que síntomas que viví con los mellizos, aparezcan de nuevo.
—Dime lo que tienes —pide Marcus cuando entramos a nuestra habitación. Suspiro, ¿cómo es que nunca se le pasa nada por alto?
—No tengo nada —declaro. Marcus llega hasta a mí y coloca sus manos en mis hombros, ejerce cierta presión que de inmediato me ablanda. Comienza una rica y necesitada tortura.
—Si no tienes nada, ¿qué es lo que te preocupa, entonces? —insiste.
—No sé cómo decirle a los mellizos que tendrán un hermano que a la misma vez será su tío o tía —explico. A diferencia de lo que pensé, Marcus comienza a reír suave. Lo miro mal, pero él no deja de reír.
—Lo siento, la mia regina —se disculpa—, pero sí es gracioso —admite. Bufo.
—No es gracioso. Si la estúpida maestra esa se llega a enterar, sabrá Dios las cosas que va a decirle a mis hijos. No quiero que los confunda —reconozco. Marcus me hace sentar en la cama sin dejar de masajear mis hombros.
—Yo mismo voy a anunciar al mundo por todos los medios habidos y por haber, que seré padre de nuevo. Así que lo más probable es que esa maestra se entere, pero, ¿adivina qué? —pide. Lo miro directo a los ojos antes de tomar aire. Presiento qué dirá una de esas cosas que me dejan más embobada por él que de costumbre.
—¿Qué? —inquiero. Marcus sonríe satisfecho y se inclina para dejar un tierno beso en mis labios antes de enderezarse.
—Nadie va a confundir a los mellizos, ni siquiera esa mujer. Además, ¿crees que se sentirán raros por tener un hermano que también es su tío o tía? —pregunta. No respondo porque no sé qué responder—. Si fuera yo me sentiría único y afortunado. La mia regina, todo con nuestra familia es único y afortunado. Nunca nadie va a poder hablar algo malo de nuestra familia y eso ser cierto —declara. Sonrío cómo idiota.
—Sí, tienes razón. Los mellizos van a amar a este bebé y serán los mejores hermanos del mundo —zanjo. Marcus asiente sonriente.
—Vas a darme un hijo, mi reina —dice de pronto, haciendo que mis ojos se humedezcan.
—Tendremos un hijo, mi rey —prometo.
—¿Tienes idea de cuánto he deseado esto? —pregunta y ya las lágrimas ruedan sin permiso sobre mis mejillas.
—El mismo que yo llevo deseándolo, mi amor —confieso. Marcus asiente y seca mis lágrimas.
—Sí. ¿Y sabes que es lo mejor de que estés embarazada? —cuestiona ahora. Arrugo el rostro y niego—. Que tu nivel de libido debería de aumentar muchísimo, a lo que yo estaré encantado de complacer —asegura. Río con ganas.
—Tú nunca te cansas —digo entre risas.
—¿De ti, de tu cuerpo, de tus nalgas? Imposible, la mia regina —promete, haciendo que todo en mi ser se caliente de buena gana. Marcus siempre sabe cómo encenderme sin tan siquiera esforzarse.
¿Es ese un don o mi perdición?
Pido disculpas por lo tarde. Sin embargo, he estado bastante ocupada. Gracias a Dios se acercan los capítulos finales del libro. No será tan largo como los anteriores porque este libro no necesita tanta historia.
Pd: Gracias a la personas que olvidaron por completo felicitarme el día de mi cumpleaños. Se los agradezco.
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Per Sempre. [Completa]
RomanceLa tercera y última entrega de la trilogía Lombardi está aquí para revelar lo que ha sido de la vida de todos. Han pasado ya 10 años desde el final del primer libro... ¿Cómo va la vida de todos los involucrados en ese final? ¿Qué ha pasado con las d...