xi. can we blame the gods for this?

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xi. ¿podemos culpar a los dioses por esto?

         CUANDO ASTRID VIO AL CHICO DE CABELLO NEGRO DESCENDER POR LAS ESCALERAS, con el ánimo casi sombrío, le quitó a Annabeth la gorra de las manos y ambas se ocultaron en el mismo rincón, a la espera de que Quirón las llamara

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         CUANDO ASTRID VIO AL CHICO DE CABELLO NEGRO DESCENDER POR LAS ESCALERAS, con el ánimo casi sombrío, le quitó a Annabeth la gorra de las manos y ambas se ocultaron en el mismo rincón, a la espera de que Quirón las llamara.

—¿Y bien? —preguntó Quirón.

Percy se dejó caer en una silla junto a la mesa de póquer.

—Dijo que recuperaría lo que fue robado.

Grover se inclinó hacia adelante, mordisqueando emocionado los restos de una lata que Quirón le había pasado.

—¡Eso es genial!

—¿Qué fue exactamente lo que dijo el Oráculo? —insistió Quirón—. Es importante.

—Dijo que iría al oeste y vería a un dios que se ha revelado, que recuperaría lo que fue robado y lo devolvería de forma segura.

—Lo sabía —murmuró Grover, el más entusiasta en la sala, aunque Percy parecía como si hubiera recibido una sentencia.

Quirón frunció el ceño.

—¿Algo más? —preguntó, con el tono de quien sabe que no le han dicho todo.

Percy se removió, incómodo, y Astrid notó cómo evitaba las miradas.

—No —respondió al fin—. Eso es todo.

Quirón lo estudió en silencio.

—Está bien, Percy. Pero debes saber algo: las palabras del Oráculo casi siempre tienen doble sentido. No te atormentes aún. La verdad solo se hace clara cuando los acontecimientos ya están en marcha.

Percy asintió, visiblemente ansioso.

—Entonces, ¿a dónde voy? ¿Quién es ese dios en el oeste?

—Piensa, Percy —le dijo Quirón—. Si Zeus y Poseidón se debilitan en una guerra, ¿quién se beneficia?

Percy dudó.

—¿Hay alguien más que quiera tomar el poder?

—Sí. Alguien que ha guardado rencor desde que el mundo fue dividido hace eones. Alguien cuyo poder crecería con la muerte de millones. Alguien que odia a sus hermanos por obligarle a un juramento que ambos han roto.

—Hades —dijo Percy, comprendiendo de inmediato.

Quirón asintió.

—El señor de los muertos es la única opción lógica.

Grover soltó el pedazo de lata que tenía en la boca, alarmado.

—¿Hades? Pero Hades odia a todos los héroes —protestó Grover—. Sobre todo si se entera de que Percy es hijo de Poseidón.

DANDELIONS, percy jacksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora