Sherlock Holmes y las cien puertas (Sherlock BBC)

Verdaderamente, el mensaje

Pues aquí tenéis el primer capítulo del maratón, ¡espero que os guste!
Por cierto, está dedicado a @PaulaZumelzu, que fue la única persona que supo descifrar el mensaje de todas las que lo mandaron. En el fondo, no creo que fuera tan difícil... ¡Pero buaano!
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(Emma P.O.V)
️John yo nos encontramos en la entrada del Club Diógenes. En el más absoluto silencio, entramos en él, y en la habitación, donde había un Mycroft con ojos llorosos, un Lestrade bebiendo y un Sherlock al borde del colapso mental.
Me acerqué a Sherlock lentamente, y cuando posé mi mano en su brazo me miró con una cara de desquiciado que me asustó.
- Sherlock...- susurré, agobiada- ¿qué ocurre? ¿Estás bien?
Él solo repetía:
- Es sólo un juego. Quiere hacerme sufrir. Le tiene. Le tiene, va a matarle.
- ¡Sherlock!- le gritó John, zarandeándole- ¡Concéntrate y dinos ya que ocurre!
- Le tiene, le tiene- seguía repitiendo él- ¡John, ese mounstruo va a matar a mi padre y no puedo hacer nada!
- ¡¿Pero qué?!- gritamos John y yo al unísono.
La voz de Lestrade se introdujo en la conversación.
- El padre de estos dos ha sido secuestrado- dijo- pero se han roto por la presión y no saben pensar ahora. Miradlo, todo está en el poema.
Nos pasó una carta con un poema, que leímos juntos. Yo, sinceramente, no entendí nada, ni le encontré un sentido, mas la cara de John se iluminó nada mas verlo.
- Línea recta- susurraba- ¿línea recta? ¡Sí, línea recta! ¡Ya lo sé!
Todos nos agrupamos a su alrededor salvo Sherlock, que se había agazapado en una esquina y murmuraba datos científicos inútiles y lloraba.
- Dadme un bolígrafo- pidió John.
Mycroft le pasó uno, y John comenzó a marcar palabras. Al principio, ninguno de nosotros lo comprendía, pero tras un rato, todo estuvo claro.
- Dios mío- dijo Mycroft- yo conozco esa técnica. Era usada en la guerra, para los mensajes cifrados.
- En efecto. Se enviaban las órdenes camufladas en un texto sin sentido por si eran interceptadas. Esta era una de las formas de camuflaje- aseguró John.
Tras las marcas que hizo John, el poema rezaba así:
«~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~Línea recta~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Huyendo del lobo una niña había.
Osos salían también de su guarida,
tan lento, muy lento, pues ya era de día.
En la cabaña un grito se oía,
la madre de la niña, que la vio en su huida.
Dando traspiés la niña corría,
unos pasos más y su casa alcanzaría;
mas el destino, cruel y con alevosía,
en vidas humanas otra vez se entrometía.
La niña a su casa no llegó con vida.
La madre, trastornada, de pena se consumía.
Inútil es tratar ya de salvarse. Es de día.»
HOTEL DUMELLI