Pagaran por lo que hicieron

Capítulo 15: Viejo Harvey

Ryder

 

Hace un par de meses.

 

>Espero inmóvil un par de minutos más, cuando finalmente compruebo que las tres chicas con las que pasé la noche están profundamente dormidas desenredo los brazos de Ashley de mi cuello, o ésta era Jessica?, da igual, tomo mis pantalones y me los pongo. En ese momento noto como una de ellas se remueve pero no abre los ojos y decido salir de aquí cuanto antes, lo último que necesito es una escena, puedo lidiar con una chica, pero no estoy seguro de poder lidiar con tres a la vez.

 

Tomo mi camiseta y me la cuelgo al hombro para luego salir por la ventana de la habitación, agradezco mentalmente a la chica que se le ocurrió que usáramos una de las habitaciones de la planta baja.

 

Camino a casa ya que no queda tan lejos, cuando estoy a un par de manzanas tomo mi celular para ver la hora, las 11:30, perfecto a esta hora George lleva bastante tiempo metido en su estudio así que no tendré que toparme con él cuando me vea llegar.

 

Al llegar a la entrada el lamborghini aventador blanco de George está esperándolo en la entrada del garaje, me quedo idiotizado observando el auto deseando que algún día pueda tener uno así. Salgo de mi ensoñación y me pongo la camiseta, es mejor no levantar sospechas.

 

Finalmente entro a la casa y Penélope me saluda dándome un beso en la mejilla de forma muy maternal, para mi mala suerte en ese momento George sale de su estudio y me observa completamente serio.

 

—Ryder ven un momento, necesito hablar contigo.

 

Mierda.

 

Asiento con la cabeza y lo sigo hasta su estudio, una vez dentro cierro las puertas corredizas mientras invento alguna excusa creíble en mi cabeza.

 

—Hablé con Julie.—dice apenas me doy vuelta y frunzo el ceño de inmediato sin entender a que vino eso.

 

—Y…

 

—Me lo contó todo Ryder.—responde mientras se apoya en el escritorio.

 

Suspiro mientras tenso la mandíbula, no puede ser, tenía que ser tan chismosa de decirle a George que me fui con las hijas de Robert, aunque por la expresión de George no creo que sea eso lo que ocurrió.

 

—¿Qué fue lo que te dijo?—pregunto antes de comenzar a dar explicaciones.

 

—Me dijo que ayer por la noche te fuiste con un amigo. Tú no tienes amigos Ryder, a menos que hablemos de Josh…

 

Alzo ambas cejas al oír lo que está diciendo, maldición esa niña me acaba de meter en un gran problema. George me mira fijamente y yo le mantengo la mirada, no voy a mostrarme intimidado ante él.