Capítulo 20: Sociedad y viajes

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Dos días, dos días han pasado desde que Ryder recibió ese mensaje y también esa fue la última vez que lo vi. He dejado una incontable cantidad de mensajes en su correo de voz preocupada por él y no ha dado señales de vida. Maddison ha intentado distraer mi mente de todo el asunto pero no lograré calmarme hasta que vuelva a ver a Ryder.

Ahora me encuentro sentada en el enorme sillón de la sala con la televisión encendida pero no puedo prestarle atención a nada realmente. Doy un respingo cuando una mano se posa suavemente sobre mi hombro.

—Cariño, ¿te encuentras bien?—Penélope aparece junto a mi.

—Hmm... He estado pensando sobre algo que George me dijo hace mucho tiempo ya.

—¿Sobre qué?

—Él dijo que conoce a muchas personas a las que puede llamar "amigos" y muchos otros que no lo son... ¿Esas personas podrían intentar hacernos daño?

—Oh cariño, el señor Montana tiene a muchas personas que los protegen tanto a ustedes como a él.—me responde acariciando mi cabello tratando de calmarme.

—¿Y que hay de los padres de Ryder, acaso no eran sus amigos?

—Hay ciertos temas de los cuales es mejor no hablar. El señor Montana se siente muy mal por su perdida.

—¿Él no podía prevenir que ocurriera?—Penélope me muestra una mirada de lástima con una pequeña sonrisa.

—Nadie puede prevenir un accidente como ese.

El sonido del timbre nos interrumpe y Penélope se aleja dejándome sola con mis pensamientos. Increíblemente no siento miedo por el mensaje en el que hablaban de mí, estoy preocupada por Ryder, por no saber nada de él. Hasta podría decir que me encuentro algo deprimida.

—Un joven ha venido a verte.—me informa Penélope y detrás de ella aparece Trevor.

—Ya no hay por que llorar, tu compañero de parrandas está aquí.—dice con una gran sonrisa.

—Hola Trev.—saludo intentando sonreír pero por la expresión del chico no sale más que una mueca.

—¿Por qué tan deprimida?—se sienta junto a mi y pasa un brazo sobre mis hombros.

—¿Por qué piensas eso?

—Bueno estás mirando un programa sobre el ciclo de vida de los cangrejos y además tienes puesta una camiseta que dice "Leave me alone so I can die"—responde apuntando a mi vieja camiseta.

—Es muy vieja...

—¿Sabes que puede animarte?—lo miro esperando que siga hablando—Salir de fiesta con tu buen amigo Trev.—dice guiñando un ojo.

—Buen intento.—respondo dándole un par de palmadas en el pecho.

—Sabes, tengo un método infalible para levantar el ánimo. ¿Quieres intentarlo?

Me encojo de hombros—Ya que...

—Tranquila, no te entusiasmes tanto.—responde haciendo notorio su sarcasmo.

Trevor toma el teléfono y ordena una pizza familiar y helado. Luego de que nuestro pedido llega nos pasamos las siguientes dos horas y media comiendo y mirando un maratón de Friends que mi acompañante encontró haciendo zapping.

—¿Te sientes mejor?—pregunta mientras traga la porción de pizza que estaba masticando.

—Algo...

Pagaran por lo que hicieronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora