Habitación 101.

Stonem.

¿Nunca antes habías venido a este bar? - me pregunto Chris.

Ya habíamos llegado a un bar famoso de por aquí. Apenas entramos vi a unas cuatro chicas borrachas y encima de hombres.

Nunca - le dije mientras nos dirigíamos a la barra.

Pues de lo que te perdiste - me dijo Chris - ¿Que vas a tomar? Nada muy fuerte, no quiero que estés vomitando ni nada de eso.

Por favor, puedo controlarme - le dije presumiendo - Primero, tomaremos unas cervezas, solo para comenzar.

Como gustes - me dijo él mientras hacia el pedido al bartender.

Mientras esperaba las bebidas, un chico se me acerco, era bastante atractivo realmente, pero tenía que mantener mi distancia si no quería que Chris le rompiera la cara.

Hola cariño - me dijo muy cerca, su voz era bastante ronca - ¿Quieres un trago?

No gracias - le dije y me aleje un poco.

Vamos, ¿qué es lo peor que podría pasar? - me siguió hablando.

Dije que no, gracias - le respondí de nuevo - Ahora, largo.

Escucha, se que soy un extraño pero - dijo él pero fue interrumpido.

Dijo que no, y que te largaras - dijo Chris a mis espaldas, sonaba mas rudo de lo normal - ¿Que es tan difícil de entender?

Oye amigo - dijo el chico riendo - No trates de ser el héroe, y búscate a otra. Estamos en algo aquí.

Oh no...

Oye "amigo" - dijo Chris sonando bastante malhumorado - Ella es MI novia. Así que tienes unos tres segundos para largarte de aquí si no quieres que te golpee tu horrible rostro.

Él chico pareció entender y de mala manera se fue.

Yo voltee a ver a Chris, quien no le había quitado la mirada al chico. Tome su barbilla y poniéndome de puntilla deposite un beso en sus labios. Eso pareció calmarlo, ya que todos sus músculos se relajaron.

Odio a esos idiotas, que buscan a cualquier chica - dijo sin verme a los ojos.

¿ES EN SERIO?

Me le quede viendo mal hasta que se dio cuenta.

¡Ya lo se! - dijo entendiendo - Yo era así, pero ya veo lo estupido y desesperado que me veía.

Me reí y luego tome mi cerveza... Esta iba a ser una larga noche.

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¡Quiero otra! - le grite a Chris - ¡Por favooooor!

Ya dije que no - me respondió - Ya estas lo suficientemente borracha y solo tomadte cuatro tragos. Aun sigues siendo una nene.

¡Una nene con la que tienes sexo! - le dije. No se que rayos hay en mi mente en estos momentos - ¡¡Ahora quiero otro trago!!

¡Te dije que no! - contestó él - Ya deberíamos irnos. No aguantaras mucho mas.

¿Ah no? - le grite - Pues mírame. Y si tu no me vas a comprar otro trago, pues yo misma me conseguiré uno.

Cox - me dijo - No te atrevas.

Adios - le dije y me fui a la barra yo sola.

Apenas podía caminar, y apenas estaba consciente de mi misma. Pero estaba disfrutando estar aquí y estar así.

Cuando, como pude, llegue a la barra, una chica estaba bastante peor que yo y estaba peleando con el bartender.

¿Cómo que no? - gritaba la chica - ¡Yo soy mayor de edad! ¡Puedo tomar lo que quiera!