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Luego de largas horas, por fin podía descansar. Estoy tan agotado, confundido, feliz, fascinado y sorprendido.

Amin, el enorme oso, me contó las historias sobre Jungkook, una versión corta y distinta.

Llegamos a casa muy tarde y Soobin seguía despierto, esperándome.

Y después de una noche de sueño profundo, me levanté muy animado. Hoy, Jungkook, me llevará a otro lugar y de seguro será igual o más bonito que el anterior.

Podía llevar a Soobin, según el Alfa, el lugar donde íbamos era tranquilo y me aseguró que mi bebé estaría bien.

Jungkook es muy cuidadoso con sus acciones.

El cortejo está siendo increíble, miro la corona de flores y sonrío embobado recordando el significado de cada una.

(...)

–Mi hermoso Omega, te ves precioso– dice sonriendo y mirándome fijamente.

–¿Por qué debo vestirme así?– pregunto apretando la tela, mi rostro se siente caliente.

Estamos en una hermosa playa, la fina arena se pega a mi piel desnuda y la brisa del océano revuelve mi cabello.

Jungkook me vistió con una camisa larga que llega a mitad de mis muslos y las mangas dobladas hasta mis codos.

Era una de sus camisas, su aroma me rodeaba por completo.

–Es parte del cortejo, durante estos momentos usarás algo mío– dice arrodillándose.

Por alguna razón, Jungkook andaba muy emocionado.

Estoy sentado con mis piernas cruzadas y mis manos sosteniendo parte de la camisa para que no se levante y deje a la vista mi desnudez.

Soobin está jugando con un grupo de niños cambia formas provenientes del océano.

Al principio me mostré reacio a dejar que se alejara con ese extraño grupo de niños, no sabia de donde habían salido, aparecieron de repente sonriendo animados y trepandose sobre Jungkook.

–Jimin– Miro a mi Alfa y éste toma mis manos.–El océano es lo mas antiguo que veras, está lleno de recuerdos, sentimientos y sueños perdidos que alguien vertió en él, tratando de cumplirlos...–

Me ayuda a levantarme y me lleva hacía la orilla, nuestros pies se mojan y Jungkook sigue avanzando hasta que el agua llega a mi cintura.


–No importa lo que hagan para dañarlo, el océano siempre volverá a su estado fuerte y majestuoso.

Observo la cristalina y tranquila agua a mi alrededor. Las olas se calmaron en cuanto Jungkook tocó la orilla.

–También está lleno de tristeza, sufrimiento y pérdida. Está nutrido de  lágrimas de aquellos que vinieron a él buscando desesperadamente un consuelo, buscando la paz que les fue arrebatada y él– señala hacía la inmensidad azul sin dejar de mírame. –Les otorgó esa paz. Las primeras criaturas que en él habitaron fueron aquellas con alma rota, buscaban escapar de sus vidas y el océano les otorgó una nueva, una vida llena de pureza y seguridad que tanto anhelaban.

A lo lejos veo una pareja de delfines jugar, se veían muy felices. También sonrío y suspiro.

–Es increíble– susurro al sentir como pequeños y coloridos peces comienzan a nadar alrededor de nuestras piernas.

–Vamos a verter nuestros sentimientos en él, Omega– dice con una sonrisa.–Él los cuidará y protegerá. Cada vez que lo veas recordarás y sentirás la calidez de ellos.

DESTINO (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora