Quince| Secreto

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La luz de la mañana despertó a Seokjin. Abrió los ojos lentamente, estiró las piernas debajo de las sábanas y bostezó. Sus brazos se elevaron hasta salir de las mantas que lo cubrían, sintió el frío del otoño chocando contra sus dedos.

—¡Pero qué....! —se sobresaltó al notar que en la cama de al lado no estaba Taehyung sino Jeon Jungkook usando una de sus bermudas.

Parpadeó repetidas veces para terminar aquel sueño tan vívido, no obstante estaba muy despierto. Jeon Jungkook dormía en la cama de Taehyung con los brazos y piernas estiradas por todo el colchón. Sus dientes frontales se asomaban por sus labios entreabiertos, su cabello estaba regado por las almohadas.

Buscó algún indicio de que su hermano menor, al que cuidaba como a un hijo, no hubiera dormido en la misma cama con ese muchacho al que justo ahora tenía ganas de despertar jalándole las piernas. Su mandíbula se tensó cuando encontró un calcetín de Taehyung enredado en el tobillo de Jungkook.

Kim Taehyung siempre iba a la cama usando calcetines, durante sus sueños siempre retiraba uno y despertaba con un pie cubierto y otro desnudo; era una manía que adoptó desde niño.

—Me va a escuchar... —masculló levantándose torpemente.

Salió de la habitación azotando los talones, sus pantuflas de peluche hicieron eco por el pasillo. Sabía que su hermano y el recepcionista no eran simples amigos, todo Spring Day estaba consciente de ello, pero esto ya era demasiado.

Jeon Jungkook ni siquiera tenía el valor de confesar sus sentimientos libremente y Taehyung ya le permitía ir a casa a dormir con él.

Dio zancadas bufando, en su mente comenzaron a surgir cientos de diálogos para regañarlos a ambos, sentía la lengua seca y los hombros tensos. Nadie iba a darle amor a medias a su hermanito.

Entonces su furia desatada se apagó abruptamente, sus zancadas y sus refunfuños se esfumaron. Sus pies perdieron el ritmo errático que mantenían y se detuvo antes de llegar a la habitación de Yoongi.

Al umbral de la puerta, vestido con un pants, una playera gastada y un solo calcetín, estaba Taehyung. Se abrazaba así mismo con el peso recargado en el marco, sus ojos se perdían en el interior de la habitación.

Parecía pensativo. Un par de ojeras rodeaban sus ojos tristes, con los dientes aprisionaba las uñas de sus dedos. Seokjin no quiso interrumpir aquel instante porque no lograba comprender las acciones de su hermano.

Un efímero suspiro escapó de su boca, cambió el peso a su otra pierna y continuó observando en silencio la habitación de Yoongi.

Su molestia con Jeon Jungkook pasó a segundo plano, Taehyung jamás habría tenido ese semblante si las cosas hubieran tenido un tinte romántico ayer. Quizá, como algunas otras noches, los dos chiquillos juguetearon hasta tarde y de pronto se sintió obligado a pedirle a Jungkook que se quedara.

—Tae...

Taehyung despertó de su letargo y miró a Seokjin, se incorporó lentamente mas no se apartó de la puerta.

—¿Dónde está Yoongi?

—Ahí —señaló hacia adentro—, está dormido.

—¿Qué pasa? —caminó hasta su hermano— ¿Está enfermo?

Se inclinó hacia la entrada, Taehyung se hizo a un lado para que pudiera pasar. Yoongi dormía profundamente en su cama, tenía el rostro oculto debajo del brazo y sus pies se asomaban por una de las esquinas del cobertor.

Healing Jimin [MY;PJ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora