Healing Jimin [MY;PJ]

Cinco| Descubrimientos

Jimin despertó bajo las luces blanquecinas que tanto odiaba, su cuerpo se tensó al recordar el desmayo que tuvo en el comedor y giró la cabeza para cerciorarse de que seguía en Spring Day y no en una sala de hospital.

Al voltear hacia la derecha y reconocer a la persona que dormía en la camilla de al lado, su estómago se contrajo mientras un líquido frío se agitaba en el interior de éste.

Min Yoongi respiraba con los labios entreabiertos y el ceño fruncido, sus pequeñas pestañas ejercían un leve ondeo a medida que un sueño aparentemente malo se desarrollaba en su cabeza. 

Jimin no pudo evitar observarle.

Los hombros de Yoongi se mecían dirigidos por el ritmo de su respiración profunda, los cabellos teñidos de rubio que le cubrían la frente estaban humedecidos por una fina capa de sudor. En la punta de su pequeña nariz redonda había rastros diminutos de una reciente hemorragia nasal.

El rostro de Min Yoongi era tan pálido que Jimin pensó por un segundo que su piel era de porcelana, le fue imposible no preguntarse si al tocar sus mejillas sentiría frío o calor.

Y de pronto, mientras sus ojos viajaban hacia los aros de plata que pendían de las pequeñas orejas, Jimin recordó la escena que vio antes de desmayarse en los brazos de Namjoon. Sus mejillas se calentaron al instante y su corazón dio un vuelco que le hizo apretar los ojos.

Jimin estaba seguro de lo que vio, aquella imagen se arraigó a sus pensamientos con la fuerza de las raíces de un roble. Antes de perder el conocimiento había visto a Yoongi besar su mejilla, pudo observar perfectamente sus labios rosas acercarse hasta su rostro con una mueca de completa felicidad.

Nunca antes tuvo una alucinación tan vívida, tan real que incluso parecía un recuerdo y no un producto de su imaginación.

—¿Te sientes mejor, Jimin-ssi?

Jimin respingó en su lugar y volteó la cabeza con un movimiento brusco que le provocó un ligero dolor en el cuello. Frente al espacio de camillas, Kim Taehyung estaba sentado en un banquito de metal con las piernas cruzadas; sus estilizadas manos se mantenían entrelazadas sobre sus muslos delgados.

—Y-Yo... —balbuceó bajo la mirada intensa del chico nuevo—, sí...

—Hoseok me ha pedido que esperes a que Namjoon o Yeonjun vengan a revisarte, hasta entonces deberás permanecer acostado.

Jimin asintió volviendo la mirada hacia el techo del consultorio, aquellas indicaciones las conocía de memoria, no era la primera vez que se desmayaba en Spring Day.

El silencio en el consultorio comenzó a incomodarle, Kim Taehyung tenía una impetuosa mirada que le impedía voltear hacia los lados. Si giraba a la derecha encontraría al enfermero, si giraba a la izquierda encontraría a Min Yoongi dormido.

—¿Qué le pasó? —habló al final, clavando sus ojos marrones en las lámparas.

—¿Perdona? —Taehyung levantó la mirada de sus uñas y observó a Jimin.

—A tu amigo, ¿qué le pasa?

—¿A Yoongi? —levantó las cejas—, oh, bueno... él sufrió un colapso nervioso, supongo.

Jimin sentía curiosidad, el desmayo que habían sufrido al mismo tiempo lo llenó de preguntas, sin embargo, sabía perfectamente que el nuevo asistente de Hoseok no podría aclarar ninguna de ellas.

Taehyung, quien sentía un ligero dolor en el pecho, no pudo contener la necesidad de ser escuchado. Las normas profesionales que aprendió en la carrera de pronto abandonaron su cabeza.