La última de los Fernández [Luis Miguel]

❝ Capitulo 11 ❞

•1 Semana Después•

La cabeza me dolía, hace una semana que eh estado viajando con Alejandro, y por fin su gira había terminado, estábamos en el avión, mirando por la ventana, para así despejar mí mente.

Varias horas después nos bajamos del avión, me sentía mareada, pero no era nada de que preocuparse, un auto nos vino a recoger de inmediato, en al auto pude descansar un poco hasta llegar a mí casa.

Senti como alguien tocó mí hombro, me levanté lentamente, ya habíamos llegado a casa, suspiré bajando del auto, allí estaban mis padres y mis hermanos esperandonos, sonreí con cansancio y fue hacia ellos.

—Te ves cansada—Me dijo mí madre—¿Por qué no vas a descansar?—.

—Fue tan hermoso mamá, conocí nuevos lugares, escenarios, ¡Por fin pude pisar un escenario!—.

Estaba tan feliz por eso, que ni siquiera había dormido lo suficiente en la semana de viaje, por lo que me comenzé a sentir un poco debil.

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—¿Y tu como estás hijo?—.

Pregunto mi padre, termine de bajar las maletas, para mirarlo.

—Si, estuve un poco cansado pero no es nada de que preocuparse—.

—Que bueno—.

—Bueno yo me voy a mí habítacion, quiero descansar—.

(Tn) le dio un beso en la mejilla a nuestra madre, empezando a caminar en dirección a la casa, pero caminaba lentamente.

—Creo que se va a des...

Ni siquiera termine de hablar cuando la vimos caer al suelo, todos fuimos hacia ella alarmados, ya que al parecer se había desmayado.

La tomé en mis brazos, siguiendo a mí madre, que me decía que la lleve a su habitación, tenía un poco de dificultad ya que (TN) para ser delgada pesaba mucho.

Cuando llegamos a la habitación la dejé con cuidado en su cama.

—¿Es que acaso no la cuidas?—.

La voz de Vicente hizo que rodará los ojos.

—(TN) es lo suficientemente mayor como para cuidarse sola ¿No?—.

—Pero ella iba contigo, bajo tu supervision, era tu obligación cuidarla—.

—¡No puedo estar siempre tras de ella como su niñera! Yo también tengo cosas que hacer—.

Los gritos de un momento a otro inundaron la habitación de (TN).

—(TN) es la menor de nosotros, es tu deber cuidarla, chingada madre—.

Grito enojado ganándose un zape por parte de mí madre.

—Ya dejen de gritar no están en si habitación, respeten por favor—.

—El comenzó—.

Minutos después de esperar a que (TN) despertara, fuimos a la sala.

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Me desperté lentamente, sentándome en mí cama, al frente mío estaba Alejandra, que al verme me sonrió y se acerco a mí.

—¿Que sucedió?—.

Pregunte mientras bebia un poco de agua que me dio.

—Te desmayaste, creo que fue por qué no has descansado lo suficiente—.

—Estaba tan emocionada por todo que el sueño se me fue—.

La puerta se abrió dejando ver a mí madre.

—(TN), un muchacho vine a verte, dice que necesita hablar contigo de algo importante—.

—¿Un muchacho?—.

Pregunte confundida.

—Si, es muy guapo, no lo hagas esperar hija—.

—Esta bien mamá, dame un momento y bajaré—.

Cerro la puerta, no sabía de quién estaba hablando, no podría ser Luis Miguel ¿O si?.