Melodías de amor.

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lo pongo por las dudas jajaj.
Aviso: contenido para adultos mayores de 18 años.
Disfruten mis bebas 🔥




El ruido del ascensor, anunciando su visitante, hace correr a Charly que estaba terminando con los últimos detalles de su gran velada, al encuentro de su amada.
Se recostó sobre el ventanal de su departamento, el que da justo frente a las puertas del ascensor. Cruzando sus brazos y mostrando sus amplios y hinchados bíceps aproposito, mostrando todo su lado más varonil.
La ansiedad lo carcomía. No había imagina recibir ese mensaje de su reina hace unas horas atrás, aceptando su invitación. Parecía un quinceañero que iba a verse en su primera velada con la culicagada que le gusta. Hasta si se ponía un poco cursi, podría decir que sentía las tan famosas mariposas en el estómago. Largo una pequeña carcajada mientras se mordía los labios, analizando en el estado que Yeimy lograba ponerlo, jamás pensó en ser un hombre cursi enamorado. Eso no era su estilo, el era el chico malo, el que todas las mujeres lo deseaban. Sin embargo acá se encontraba babeando por ella, siendo capaz de hacer cualquier cosa que le pidiera con tal de verla feliz.  Había pasado casi 40 minutos eligiendo que ponerse de vestir, arreglando todo su departamento para que estuviera todo adecuado a Yeimy, hasta pidió el mejor Sushi de Medellín y una botella del más exquisito vino se enfriaba en la frapera, que se encontraba sobre la mesita ratona del living. 

Estaba perfumado, peinado con su copete en realidad todo despeinado, el sabía que causaba una imagen tentadora de el, vestido con un jean blanco roto en las rodillas y una camiseta negra que definía su pecho firme y amplio. Las mangas le quedaban apretada haciendo resaltar sus brazos, haciéndolos más músculos. en poco palabras era una imagen Totalmente apetecible, un especimen perfecto. Sus cinco sentidos estaban atentos a que cuando se abrieran esa puertas de par en par, la iba a envolver en una abrazo fuerte y cálido, sintiéndola, aspirando su esencia. Sus ojos estaban fijos en los números color rojos, que se encontraban arriba de las puertas del ascensor, mostrándole como iban pasando los pisos, parecía una cuenta interminable. Hasta que ve que marcaba que faltaba un piso, hasta llegar a el. Inconcientemente comenzó a golpear la bota contra el piso de madera, no pudiendo ocultar los nervios. De golpe para el podía decir que escucho el sonido más anciado, el clink del ascensor al llegar. Rapidamente se levantó de su postura, clavando sus ojos sobre la superficie gris de metal de las puertas, para recibirla. En cuanto se abrieron la puertas, Charly quedo completamente embelesado, se podría decir mejor totalmente pasmado. Su respiración se quedó enganchada en su pecho y su boca se abrió a penas, buscando alguna palabra que decir. Sus ojos la recorrían de arriba abajo, fijando cada detalle en sus retinas. Ahi bajo el aro de luz flourecente del ascensor, estaba su reina, bien dicho toda una reina. Enfundada en un apretado enterito negro, con un escote en V bastante profundo. Su escote iba acompañando de una gargantilla dorada que completaba el look, en el medio tenía un cinturón que embarcaba su figura, su cintura. Su cabello estaba como a él le encantaba en ondas bien definidas y su maquillaje era suave a penas un brillo en sus labios, haciéndolos resaltar. Estaba perfectamente preciosa y todo para el. Ese pensamiento trajo ideas impuras a su cabeza que prontamente las descarto al verla avanzar hacia el.  El comenzó a aplaudir mientras se acercaba.

- ¡Una miradita mi reina!.

Yeimy se mordio los labios conteniendo la sonrisa que le causó ese comentario de el, moviendo la cabeza de un lado a otro y saliendo del ascensor.

- ¡No cambias más pues, eh!.

- Si sabes que te encanto así. ¿O no?

- El siempre tan humilde.

Charly termino con los pocos pasos que quedaban entre ellos y deslizo sus manos por su cintura, acercándola a su cuerpo, mientras agachaba su cabeza a ella, pasando la punta de su nariz por el costado de su cuello aspirando su perfume.

"Tenías que ser tu"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora