Volviendo a Amar

CAPÍTULO 41

-Jason... Detente por favor, prometiste que te cuidarías y no lo estás haciendo.- Le digo zafándome de su agarre, cuando intentaba desnudarme de nuevo para volverlo hacer.

-Pasó mucho tiempo desde aquella vez que lo hicimos, te extrañaba demasiado.

-Pero lo acabamos de hacer...- Digo entre risas.

-Una sola vez no es suficiente para mí, te necesito Angelina.

-Y aquí estoy pero ya no habrá más de lo otro así que contrólate.

-Ya somos adultos llámalo por su nombre, Sexo, o no, eso no es lo que hacemos.

-¿Qué hacemos nosotros entonces?

-El amor.

Me abraza nuevamente y nos besamos, estar así con él es lo mejor, sus ojos color miel reflejan alegría, me dan la esperanza que necesito para ser feliz y la seguridad para volverme a enamorar.

Jason fue a bañarse y para pasar el rato me fui a la sala a observar la ciudad desde esa gran ventana donde la mamá de Jason solía mirarla también, el timbre sonó y Susana estaba preparando el almuerzo así que me dispuse a abrirla yo, no veo nada de malo en eso.

La cara de desagrado que se asomó al abrir la puerta le dañaría el rato a cualquiera, era Aurora la tía de Jason acompañada de David, se enteró del incidente y vino a ver cómo sigue su sobrino.

-¿Qué haces tú aquí?- Preguntó de manera despectiva.

-Buenos días para usted también, ¿Cómo estás David? Que gusto verte de nuevo.

-Igualmente Angelina, estoy bien gracias, ¿Y Jason?

-Se está dando un baño, pasen, en un momento los atenderá.

-Debo admitir que como sirvienta haces un muy buen papel.

-Le agradezco que se guarde sus insultos señora, no pienso permitir que me humille.

-Y yo no pienso permitir que te aproveches de mi sobrino.

-Yo no quiero aprove...

-Seguramente vienes tras su dinero, dinero que luchó su padre y que hoy en día ha luchado él, Jason no está solo, yo no pienso permitir que entres a su vida, lo enamores y lo destruyas, todo por tus intereses.

-Yo no sé de qué está hablando... No pienso aprovecharme de Jason, no estoy con él por dinero sino por amor.

-¿Amor? ¿Hace cuánto lo conoces? ¿Qué tanto lo conoces? ¿Cómo puedes hablar de amor?

-No sé a qué se debe su amargura, no sé con qué clase de hombre se casó, ni por lo que ha tenido que pasar, pero mi relación con Jason no es asunto suyo, sin embargo le diré que no está basada en ningún interés más allá de amarnos y apoyarnos.

-Te lo advierto niña, no voy a permitir que te aproveches de mi sobrino, que te adueñes de lo que no te corresponde o que lo hagas sufrir.

-¿Qué piensa hacer al respecto?- Pregunto a punto de perder la paciencia.

-Lo que sea necesario para separarte de él.- Dijo a escasos centímetros de mí, en un tono extremadamente amenazante.

-Mamá por favor, esto no es necesario, Angelina es una buena mujer...

-No te metas David...

-Tía, David, no sabía que estaban aquí, que gusto verlos.- Interrumpió Jason llegando a la sala después de haberse bañado.

David se acerca a Jason y lo saluda con cuidado temiendo lastimarlo, la bruja de aurora no continuó su absurda discusión, me miró amenazante y se alejó para saludar a Jason.

-Querido sobrino, ¿Cómo estás? ¿Qué fue lo que pasó?- Le dijo mientras le daba un beso en la mejilla y un leve abrazo.

-Estoy bien no se preocupen, no fue nada, alguien me atacó anoche al salir de la clínica pero no se sabe aún quién era.

-Cómo que no es nada... Mírate, ¿Te das cuenta que desde que estás con esta niña te ha pasado de todo?

-Tía por favor, no comiences con eso.

Justo en ese momento Susana interrumpió en la sala avisando que el almuerzo ya estaba listo, al parecer mientras Jason y yo estábamos en el cuarto... Conversando, la bruja llamó avisando que vendrían y por ende Susana les hizo almuerzo también.

Fui a la cocina, tomé unos platos y ayudé a Susana a poner la mesa, Aurora no me quitaba los ojos de encima, trataba de disimularlo pero yo lo notaba, solo yo sentía su mirada asesina sobre mí.

Por otro lado a Jason se le veía muy feliz, charlaba con su familia sonriente, una que otra carcajada salía de él y era como melodía, verlo así me hacía sentir satisfecha, por eso y solo por eso estaba dispuesta a aguantarme a la bruja de la tía.

Nos sentamos en la mesa de comedor pero mi apetito era mínimo, me sentía fuera de lugar puesto que la presencia de aurora me incomodaba.

-Estás muy callada mi amor, ¿Sucede algo?- Preguntó Jason casi en un susurro, evitando ser escuchado por los demás, quise decirle que sí, que su tía era una arpía, pero me contuve, su felicidad me importaba más en ese momento que mi tranquilidad.

-Estoy bien, descuida, solo no quiero entrometerme en su conversación.

-Tú también eres parte de mi vida y de mi familia ahora, puedes entrometerte.- Mencionó la palabra sonriendo para que no sonara como un insulto. -No me molestaré.

-Jason... ¿Qué piensas hacer entonces? Necesitas reposo total, descansar, alejarte de todo.

-Concuerdo contigo tía, por eso he decidido que me iré de vacaciones unos días a San Andrés con Angelina, estoy seguro que además de descansar la pasaremos muy bien.- Quedo perpleja, vacaciones, playa, sol, él y yo solos, no me había comentado nada, no sé qué decir.

-No creo que sea buen idea que te vayas con ella Jason.

-Es mi novia, no veo porqué no sea buena idea.- Dijo Jason tratando de no ser grosero.

-Por que desde que ella entró a tu vida te han pasado un cúmulo de cosas malas que anteriormente no, qué tal te ahogues o te suceda algo más estando por allá.

-Sé que te preocupas por mi bienestar, pero créeme que mejor compañía no podría tener, todo lo que ha sucedido es solo casualidad, si de ahogarme se trata me podría suceder en las playas de aquí de Bocagrande, de Manzanillo o incluso en la tina.

Nadie mencionó nada más respecto al tema, yo me mantuve en silencio durante la comida, no quería otro disgusto y menos escuchar sus odiosas palabras, pero al marcharse dijo aquella frase que no me dejó tranquila, Haré lo que sea necesario para separarte de mi sobrino.