Volviendo a Amar

CAPÍTULO 46

-¡Jason!- La voz alterada de mi tía Aurora entrando al apartamento me interrumpió, estaba en medio de una llamada haciendo la reservación del hotel donde nos hospedaríamos en San Andrés Angelina y yo.

-¿Sucede algo tía? ¿Por qué apareces así?

-Te dije que esa mujer nos traería problemas, ¡Te dije que no debías estar con ella! Pero no... Me escuchaste...

-Tía no te voy a permitir que te metas con Angelina, ya habíamos hablado de esto, te dije que te guste o no voy a estar con ella.

-No quieres que me meta con esa... Mujer, pero sí estás dispuesto a aceptar que ella se meta con tu familia, que profane la memoria de tu madre.

-¿Qué? ¿Qué tiene que ver mi madre en todo esto?

-Veo que no estás enterado...

-¿De qué?- Pregunté con el semblante totalmente serio, mi tía no es de ponerse en estas en contra de nadie, ya me había hablado de su desaprobación con respecto a mi relación pero fue una conversación tranquila, ¿Qué razones tendría para expresarse de esa forma?

-Si ella es tan buena mujer como dices, entonces necesito que me expliques ¿Qué significa esto?- Sacó una revista de su bolso y me la entregó.

Tomé la revista y estaba mi imagen en la portada, el titular decía La verdadera y trágica historia de la familia de Jason Lombardi, quedé extrañado y me apresuré a leer la noticia.

Leí atento la noticia y contaban cada detalle de cómo mi madre en medio de una crisis psicótica asesinó a mi padre y luego se suicidó.

Mi cara más que de espanto era de dolor, como mi tía mencionó, estaban profanando la memoria de mi madre, ella no era consciente cuando hizo lo que hizo pero en aquella nota de la revista la hacían quedar como una mala madre y una mala mujer, como la responsable de un hecho atroz.

Y lo era, de eso no había duda, pero mi madre no estaba en sus cinco sentidos cuando lo hizo, ella no escogió estar enferma, ella jamás hubiese querido lastimar a su familia.

Quedé petrificado cuando leí el final de aquella malintencionada noticia, decía: Angelina Suárez, quién dice ser la actual novia del joven millonario Jason Lombardi, ha sido quien nos ha revelado la verdad que la familia ha tratado de mantener oculta por tantos años, crearon y pagaron una versión para todos nosotros respecto a las dos muertes, pero la verdad siempre sale a la luz.

No podía ser verdad eso, Angelina no sería capaz de hacerme algo así, de traicionarme de tal forma, ella sabía que ese era mi secreto más preciado, estaba en juego la memoria de mis padres ¿Para qué revelarlo? ¿Por qué contarlo? Todo estaba bien entre nosotros, ¿Qué ganaba ella con eso?

-¿Terminaste de leer?- Preguntó mi tía, solo pude asentir, seguía con la cabeza agachada mirando la revista. -Ahora ya sabes el porqué de mi descontento, no puedo creer que esa mujer se haya atrevido a decirle a la prensa lo que sucedió con mi hermana, pero lo que menos puedo creer es que le hayas confiado nuestro secreto a una total desconocida Jason, ¡Te das cuenta de lo que hizo!

-Esto debe ser falso, ella no sería capaz de hacerlo.

-¿Cómo puedes estar tan seguro de ello? Apenas la conoces... O mejor dicho, recién comienzas a conocerla.

-No... No... No puede ser...

-¿Tú crees que los de la revista se van a arriesgar a colocar un nombre siendo falso, arriesgándose a ser demandados por calumnia, difamación?

-Yo sé que no, pero no creo que sea del todo cierto, alguien más pudo haberlo revelado.

-Esa historia solo la sabíamos, Susana, David, Jerónimo el abogado de tu padre, tú y yo, solo nosotros y hemos guardado el secreto durante más de diez años, ¿Por qué querríamos contarlo ahora? Le contaste a esa mujer y fue a contarlo todo, ¿Por qué le dijiste? ¡No la conoces!

-Porque confío en ella.

-¿Confías en ella? ¡Dios mío! El amor te ha enceguecido, no te das cuenta... Esa mujer se metió en tu vida, jugó contigo, te sacó información y con ello te destruyó.- Sentía arder mis ojos, no me sorprendería que las lágrimas comenzaran a salir.

-Me niego a creer que ella haya hecho eso, no es así como se ha mostrado ante mí.- La imagen que tenía de Angelina no concordaba con esa que se me estaba presentando, todo estaba marchando muy bien, ella no tenía motivos para hacer algo así.

Me puse de pie, tomé mis cosas y me dispuse a salir del apartamento.

-¡Jason! ¿Para dónde vas?

-Voy a hablar con Angelina, necesito que ella misma me diga si hizo esto y de ser así, que me explique porqué lo hizo.

-¿Es en serio? Esa mujer hace esto y tú necesitas que le lo confirmes, puede negarlo todo ¿No crees?

-No pienso tragar entero, no pienso quedarme solo con esta versión, necesito conocer la de ella también.

-¿Por qué? Las pruebas son contundentes.

-Porque la amo tía, la amo más que a nada y aunque sea difícil de creer confío en ella, ella no es lo que tú crees, y sí, las pruebas apuntan en su contra pero he sabido de inocentes que han sido condenados y no pienso condenarla a ella sin saber qué pasó realmente.

-Haz lo que quieras, si quieres seguir con la venda en los ojos eres libre de hacerlo, pero si fue capaz de hacer algo así, no me sorprendería que hiciera algo peor, no deberías estar con ella, no merece ser parte de nuestra familia.

-Eso lo decido yo tía, quedas en tu casa, hablamos después.

Salí del apartamento lo más rápido que pude, subí al auto y me costó encenderlo, ya que, las lágrimas no me permitían ver nada, golpeé repetidamente el volante lleno de ira y frustración, no entendía porqué justo cuando creía que podía ser feliz sucedía tal cosa.

Será posible que me haya equivocado al enamorarme de ella, sería posible que ella estuviese fingiendo todo el tiempo, que no me amara, necesitaba saber la verdad, y la necesitaba a ella en mi vida.